Más del 44% de los trabajadores sienten alta tensión en su puesto de trabajo a raíz de la covid-19

El epidemiólogo e investigador de ISTAS-CCOO Albert Salvador ha recordado que se considera una situación de alta tensión cuando hay una exigencia laboral muy elevada y el trabajador tiene poca autonomía, pocas oportunidades de decisión y poco margen de influencia. Una combinación, ha señalado, que se convierte en un condicionante «muy poderoso» del estado de salud. Por este motivo, Salvador ha afirmado que «la relación entre la inseguridad y la alta tensión es la epidemia que puede venir después de la covid-19».

Al mismo tiempo, los investigadores han recordado que hay estudios previos que vinculan directamente la tensión laboral con el riesgo de una enfermedad cardiovascular o mental. Para disminuir al 44,3% actual de trabajadores tensionados, Salvador ha apelado los empresarios a aplicar más «justicia y democracia» en los puestos de trabajo, con más autonomía para la plantilla. «La alta tensión es un efecto muy claro de una organización autoritaria y arcaica, basada en el 'ordeno y mando'», ha apuntado, lamentando que «no se reconoce que, quien mejor conoce el trabajo, es quien lo hace cada día».

Por otra parte, la encuesta indica que un 12% de los trabajadores han empezado a consumir tranquilizantes a raíz de la crisis de la covid-19, y un 21,5% ha cogido estos medicamentos o somníferos durante el mes previo a la encuesta. La mitad de estos eran nuevos consumidores, mientras uno de cada tres trabajadores ya tomaba esta medicación antes del estado de alarma pero durante el confinamiento aumentó la dosis o tomó productos más fuertes.

El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha hecho un llamamiento a «disminuir las incertidumbres» para reducir la alta tensión laboral. Ha puesto como ejemplo las previsiones de los próximos meses respecto de un descenso de los salarios, situación que ha pedido regular modificando los artículos de la reforma laboral que ahora permiten a las empresas actuar de forma unilateral.

Miedo a infectarse en el trabajo

La encuesta también constata que uno de cada tres participantes (68%) está preocupado por si se infecta de covid-19 a su puesto de trabajo, una cifra que crece ligeramente (72,3%) si se les pregunta por la posibilidad de actuar como transmisor de la enfermedad. Al mismo tiempo, el sondeo muestra que un 13,1% de los trabajadores fue a su puesto de trabajo a pesar de tener síntomas compatibles con la covid-19, y el porcentaje supera el 18% en el caso de empleados con un salario bajo.

Con respecto a las medidas de protección, un 70% de los trabajadores ha manifestado que en algún momento ha ido al trabajo sin tener las medidas de seguridad adecuadas. La cifra crece hasta el 78% en el caso de los que hacen tareas de atención al público. Una situación que ha condenado Sordo, quien considera que los datos son «demoledores» y evidencian una «drástica falta de medidas de protección ante una pandemia que ha superado a todo el mundo». «Pedimos que situaciones como esta no se vuelvan a repetir», ha añadido.

Temor a no encontrar un nuevo trabajo o a los cambios de condiciones

La encuesta de la UAB y CCOO también recoge el temor del 75% de los asalariados a no encontrar un nuevo trabajo si ahora perdieran el actual, mientras que un 69,7% tienen miedo de que le bajen el sueldo y más del 50% están preocupados por si los modifican los horarios o las tareas a hacer. «Tenemos que acotar esta sensación de riesgo e incertidumbre», ha reclamado Sordo, mientras ha subrayado que en el estado español es «urgente» regular el teletrabajo y blindar las condiciones laborales.

Empeora la percepción de la salud

Entre los más de 20.000 asalariados encuestados al conjunto del estado, un 36,7% considera que su salud ha empeorado durante la pandemia, una cifra que se eleva el 41,6% en el caso de las mujeres y roza el 40% entre la gente de los 16 a los 49 años. Al mismo tiempo, un 55,1% de los participantes tiene la percepción que se encuentra ante un riesgo elevado de tener una mala salud mental.

«La encuesta es un elemento de prueba del vínculo estrecho que hay entre la salud pública y la salud laboral», ha remarcado Unai Sordo, que también ha destacado la transversalidad de las inseguridades manifestadas por los participantes al sondeo, tanto a nivel de edades como géneros y profesiones. El secretario general de CCOO ha dicho que el estudio muestra el «dramatismo» de la situación que ha dejado la covid a nivel de salud laboral y ha reclamado una integración cumplida con la salud pública.

El equipo de investigadores del grupo POWAH –formado por profesionales de Medicina, Ciencias Políticas y Sociología de la UAB- y del ISTAS-CCOO prevén hacer una segunda oleada de la encuesta COTS antes de que acabe el año para observar la evolución de los resultados presentados este miércoles.