El porqué de la condena al Fiscal General
Voy a intentar explicarles todo el entramado del juicio al Fiscal General del Estado. Lo primero que debemos tener en cuenta es que el juicio lo ha ganado el derecho a la defensa y, como en el propio juicio dijo el Decano del Colegio de la Abogacía de Madrid, «con la ruptura del secreto profesional el abogado pierde su libertad, sin abogados libres no hay jueces independientes, sin jueces independientes no hay justicia imparcial, y sin justicia imparcial se rompe el Estado de Derecho».
Los abogados en multitud de ocasiones negociamos conformidades con el Ministerio Fiscal, en algunos supuestos puede suceder que el cliente, ante, por ejemplo, una petición de años de cárcel opte por la garantía del acuerdo ante el riesgo de llegar a cumplir una pena a pesar de que se considere inocente. Que es injusto, sí, que si se llegase a juicio podrían absolverle, pues también, pero muchas veces nuestros clientes, ante la incertidumbre, buscan una conformidad, y les aseguro que también es muy humano huir de una posibilidad de cárcel o de años de recursos. Siempre les expongo con claridad las posibilidades de condena, y de absolución, la seguridad absoluta no existe y mal abogado es aquel que da seguridad absoluta ante un juicio con petición de pena por el fiscal. Estas negociaciones se hacen siempre sin el juez, si el juez supiera que estás dispuesto a reconocer los hechos estaría contaminado. Por eso esas conversaciones son secretas, y no solo con el Ministerio Fiscal sino también entre el abogado y sus clientes y entre los abogados.
Volvamos ahora a los hechos del juicio al Fiscal General, éste emite una nota de prensa para desmentir una información previa que expresamente dice: Esta propuesta de conformidad realizada por el letrado defensor reconocía la autoría del Sr. González Amador de la comisión de «dos delitos contra la Hacienda Pública por el Impuesto sobre Sociedades, 2020 y 2021». Por lo tanto, da a conocer que el Sr. González Amador reconocía los delitos a los efectos de alcanzar una conformidad. Conviene destacar en este momento que era una propuesta de conformidad, después, según los términos de la misma, la podrán aceptar o no, e ir a juicio dependerá de lo que reduzca la pena el Fiscal. Muchas veces al final no se alcanza un acuerdo y se llega a celebrar juicio oral.
Pues bien, como va a ir ahora a juicio el Sr. González si todos sabemos, incluidos los jueces, que se planteaba declararse culpable a cambio de una rebaja en la pena, ¿entienden la gravedad de los hechos?. Es un atentado directo al derecho a la defensa y a la democracia cometido por quien debe proteger los derechos de los ciudadanos. Y todo, no por una razón jurídica, sino por una razón meramente política, «si dejamos pasar el momento nos van a ganar el relato» dijo en un WhatsApp el Fiscal General. Para él y para el gobierno el relato político prima frente a los derechos fundamentales de los ciudadanos. Es tremendo, es de una gravedad siquiera imaginable en democracia. Los intereses políticos de Sánchez y su camarilla por delante de los derechos fundamentales reconocidos en la Constitución y en la Ley, pero por suerte tenemos un Código Penal que persigue estas conductas y un Tribunal Supremo independiente que lo aplica.
Sorprende ver a ilustres representantes de la izquierda española, tan prestos siempre a defender los derechos fundamentales de los ciudadanos, ponerse ahora al lado de quien los ha pisoteado, y solo por una razón, es uno de los nuestros, sin pensar que protegiéndolo ponen en peligro el fundamental derecho a la defensa y, cuestionando la sentencia de la manera que lo están haciendo, resquebrajan la separación de poderes y la independencia judicial, imprescindibles en democracia. Parte de la izquierda Española ha dejado de ser democrática.