El yacimiento del Antic de Amposta se abandonó hacia el año 200 antes de nuestra era

El grupo de investigación Seminario de Protohistoria y Arqueología (GRESEPIA) de la URV sitúa el abandono del poblado ibérico del Antic de Amposta, en la sierra del Montsià, en torno al año 200 antes de nuestra era (ANE). Durante la tercera excavación del yacimiento, que acaba este viernes, se han encontrado restos cerámicos en el sector donde se han localizado las primeras casas y recintos, que permiten poner esta fecha. Eso indica que el Antic estaba poblado cuando estalla y se produce la Segunda Guerra Púnica (entre 281 ANE y el 201 ANE) y los investigadores creen que lo abandonaron «por alguna acción de represalia por parte de los romanos».

Samuel Sardà, director de las excavaciones e investigador del Departamento de Historia e Historia del Arte de la URV ha señalado que el historiador Titus Livi hace referencia a un poblado ibérico desde el que se avisó a los cartagineses de que llegaban las embarcaciones romanas durante la batalla de las Goles del Ebro. Por las fechas, el posicionamiento geográfico y el control visual del territorio que tiene el yacimiento del Antic de Amposta, podría ser este, «perfectamente», el poblado al que hace mención Livi, según Sardà.

Después de dos semanas de excavaciones también se han podido delimitar dos fases de ocupación, la del Ibérico Pleno y la del Ibérico Final. Sardà ha adelantado que el año que viene se investigarán los estratos inferiores, «bajo los potentes niveles de derribo que este año se han documentado» y prevén que «aporten mucha más información y de más calidad».

Malacofauna y plomo

Entre los hallazgos de esta campaña hay «restos significativos» de malacofauna (almejas, conchas y otros moluscos), que indica que los habitantes del Antic aprovechaban a fondo los recursos fluviales y marítimos. «Se trata de un tipo de restos bioarqueológicos que pueden permitir extraer datos especialmente interesantes para caracterizar el paleopaisaje deltaico de época protohistórica. Es decir, pensamos que desde la arqueología podremos también contribuir a conocer mejor la historia del Delta del Ebro y su evolución», ha remarcado el director de la excavación.

Los arqueólogos han recuperado un lingote de plomo y eso se relaciona con el trabajo del metal y la actividad metalúrgica, también del bronce, en el mismo poblado.