El plan prevé recuperar el camino de sirga entre Tivenys y Bítem, en el margen izquierdo del Ebro; mejorar la Vía Verde del Valle de Zafán en la Terra Alta; intervenir en el GR-7 y en el GR-99 –para consolidarlo como vía verde del Ebro; y restaurar equipamientos públicos y turísticos. En el caso de la Terra Alta se rehabilitarían las estaciones de la Vía Verde. También se prevé impulsar el uso de bicicletas electrónicas y habilitar puntos de recarga.
La transición digital prevé un sistema de inteligencia turística para gestionar flujos de movilidad, áreas de conexión en internet en los puntos negros y la organización de acontecimientos digitales de videomapping.