El Ayuntamiento de Riba-roja d'Ebre otorga la licencia de obras para el depósito de residuos

El Ayuntamiento de Riba-roja d'Ebre (Ribera d'Ebre) ha otorgado la licencia de obras en la UTE Lestaca, formada por Urbaser y Griñó, para empezar a construir el depósito de residuos industriales no peligrosos. Los trabajos empezarán de forma «inminente» y tienen que estar acabados el 17 de julio, cuando expira la licencia medioambiental. La autorización la ha puesto a revisión el Departament de Territori para adaptarla a la nueva normativa del agua, como recomendó la Confederación Hidrográfica del Ebro, en una maniobra para intentar parar que la licencia municipal pero el alcalde Antoni Suàrez ha defendido que estas revisiones no paralizan la actividad ni la posibilidad de iniciar las obras.

El Ayuntamiento ha resuelto las 12 alegaciones que se habían presentado al proyecto – la mayoría de otros ayuntamientos de la Ribera d'Ebre y el Segrià, además de un particular- y ha aprobado la licencia de obras del depósito, después de una junta de gobierno municipal celebrada este jueves a primera hora. La licencia tiene un valor aproximado de poco más de 5 millones de euros, lo que representa «la mayor inversión hecha en Riba-roja d'Ebre desde la construcción hidroeléctrica a los años 60», como ha destacado el alcalde. Esta mañana, de hecho, algas máquinas empezaban a trabajar en la zona de las Valls.

Antoni Suárez ha señalado que se trata de una «oportunidad económica» para el consistorio, «porque podrá desarrollar programas de diversificación económica, hacer justicia social y mejorar las condiciones de vida de los vecinos». También ha calificado el proyecto como «una oportunidad laboral», porque a la inversión inicial, que supondrá 14 puestos de trabajo, se sumará una segunda planta, con una treintena de puestos de trabajo de mayor calificación.

Suárez ha remarcado que es un día «de orgullo» y en el cual «se eleva la autoestima local» y se superan definitivamente «todo un conjunto de adversidades» en el cual se han convertido desde que se comunicó el proyecto al vecinos del municipio, a final de diciembre. El alcalde ha pedido «la implicación y confianza» de los vecinos de Riba-roja pero también del resto de la Ribera d'Ebre, en el proyecto.

«Queremos seguir siendo Ribera d'Ebre y tenemos intención de seguir siéndolo y sólo lo podremos ser, si nos dejan ser el que somos como pueblo. Lo tendrían que tener muy claro desde el Consell Comarcal», ha sentenciado Suárez. Ha insistido en trabajar desde el ente comarcal en un modelo de desarrollo que garantice «la convivencia» del sector primario, el secundario e industrial –que representa el 92% de PIB de la comarca- y también del sector servicios, en concreto, el turístico. «Pedimos un modelo que incluya la Ribera norte, con Flix, Ascó y la Riba-roja vinculados a la economía industrial, del cual estamos orgullosos y en la cual no queremos renunciar», ha defendido Suárez.

El alcalde ha vuelto a remarcar la «unanimidad» de las dos fuerzas políticas del municipio para sacar adelante el depósito de residuos industrial. El jefe de la oposición, José Luís Aparicio –que fue alcalde del municipio 23 años y puso en marcha el proyecto- considera que el Ayuntamiento ha cumplido con sus compromisos. «Se pretende mantener la unanimidad por los intereses del pueblo de Riba-roja d'Ebre porque se critica mucho el vertedero pero silencian que por fin se haya conseguido que por primera vez en toda la comarca llegue uno emprendida de economía circular, que cierra el ciclo con valorización del residuos y la reducción de los mismos», ha dicho Aparicio. «Seremos referente de la buena gestión de los residuos que se hace en la comarca y en las Terres de l'Ebre», ha añadido.

Mensajes al Govern

Suárez ha agradecido el apoyodel conseller de Territori, Damià Calvet, con el pueblo y la comarca. «Ha cumplido con el compromiso alcanzado con la comarca para revisar las autorizaciones ambientales y urbanísticas, que ha quedado claro que han sido inmaculadas» y le ha pedido que cumpla con el compromiso alcanzado con el pueblo – en un pregón de la fiesta mayor- para acelerar las autorizaciones que permitirán una segunda planta de despolimerización catalítica vinculada al depósito, así como las obras en infraestructuras prometidas.

El Ayuntamiento de Riba-roja d'Ebre también ha enviado una carta al presidente de la Generalitat, Quim Torra, donde se lo invita a visitar el pueblo y «a conocer la realidad local y comarcal». «Le pedimos que afronte de una vez por todas la reindustrialización de la Ribera norte. No podemos demorarlo mucho más», ha añadido el alcalde.