Los trabajadores del Hospital de Móra d'Ebre se cierran para denunciar «el espolio» de los fondos de reserva desde Reus
El comité de empresa y el Ayuntamiento de Mora abandonarán al Consejo de Administración de Gecohsa
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Los trabajadores de la salud del Hospital Comarcal de Móra d'Ebre han iniciado a las nueve de la mañana un encierro en la recepción del centro hospitalario, que se alargará hasta mañana por la mañana. Protestan por el desvío de los fondos reservados que les quedan para tapar el déficit del Hospital Sant Joan de Reus y de la desinversión y los recortes en que se han sufrido en el centro ebrense. El comité de empresa y el Ayuntamiento de Móra d'Ebre han decidido abandonar su lugar en el Consejo de Administración de la gestora Gecohsa porque no se los tiene en cuenta y advierten que habrá más acciones de protesta si no se concreta, en enero, como será la empresa pública que el CatSalut ha anunciado que se creará el año que viene para gestionar los hospitales de Móra d'Ebre y Reus.
Cansados de lo que consideran un «espolio» de su ahorro, los trabajadores del Hospital Comarcal de Móra d'Ebre hacen este miércoles un encierro de protesta en la recepción del centro hospitalario. La concentración se ha organizado cerca que Gecohsa -filial de Sagessa y gestora del hospital-, pueda volver a desviar 3,5 millones de euros los fondos reservados del Hospital de Móra d'Ebre para tapar el déficit del Hospital Sant Joan de Reus. La decisión se podría tomar este viernes en los Consejos de Administración de Gecohsa y Sagessa.
El centro hospitalario de Reus cerró en el 2017 con 3,2 millones de euros de déficit y el negativo de este año puede rondar los 2,5 millones de euros. El año 2016 ya se desviaron 4 millones de euros de los fondos reservados de Móra d'Ebre para cubrir los desajustes acumulados en Reus.
En cambio, en el Hospital de Móra d'Ebre hace años que los trabajadores asumen recortes, no cobran los objetivos – cuando sí que se han pagado a los trabajadores del Hospital Sant Joan- y acumulan una grave desinversión. «Estamos hartos de esta situación y queremos marcharse de Reus o no se aguantará el hospital», ha advertido al portavoz del comité de empresa de los trabajadores del Hospital de Móra d'Ebre, José Domínguez.
El CatSalut ha prometido resolver en enero qué tipo de empresa pública asumirá la gestión del centro hospitalario ebrense, si se hará conjuntamente con el centro de Reus o por separado, y qué inversiones pueden garantizar a corto plazo. Como ha explicado el alcalde de Móra d'Ebre, Joan Piñol, el director del CatSalut, Adrià Comella, se ha comprometido a concretar la primera quincena de enero, como resolverá los principales problemas del Hospital Comarcal. «Se comprometió a venir a explicar si será Gecohsa, o Gecohsa con otro nombre, o será una gestión diferente, y las inversiones mínimas, que calculo que serán de 700.000 euros o 1 millón de euros, que hacen falta de forma inmediata, además de un calendario de otras inversiones a largo plazo», ha asegurado el alcalde.
El centro cuenta con un Plan de Inversiones, de 2,5 millones de euros, donde se detallan las mejoras necesarias como el del servicio de radiología, que tiene maquinaria de más de 30 años, los estants de los médicos «que están en una situación deplorable», las camas, la cafetería que está cerrada u otros servicios del centro. «En el Hospital podemos hacer museo arqueológico de la sanidad», ha ironizado Domínguez.
Si en enero no se ratifican los compromisos del CatSalut, el comité de empresa ya advierte que desplegarán más acciones de protesta. «Si no se formaliza, los trabajadores y el territorio creemos que tenemos que decir basta. Que se consolide la empresa pública que ha dicho el CatSalut sería la solución ideal, si es hace desde territorio mejor, y que vengan las inversiones que toca», ha reclamado el portavoz de los trabajadores.
Dimisiones en el Consejo de Administración
Tanto el comité de empresa como el Ayuntamiento de Móra d'Ebre han decidido abandonar al Consejo de Administración de Gecohsa. «Dejaremos la silla que tenemos porque no sirve por nada, oímos que no nos han escuchado, ni nos han hecho caso y han hecho lo mismo que vemos haciendo», ha dicho Domínguez. El Ayuntamiento de Móra formaba parte desde hace un año pico|retazo pero el alcalde considera que no ha servido de nada porque acaban decidiendo a los concejales del Ayuntamiento de Reus. «Hemos intentado poner voz al Consejo de Administración pero ha sido tabique porque no escuchan prácticamente nada», ha lamentado Piñol.
Celeridad en el cambio de gestión
Desde el grupo de ERC en la Ribera d'Ebre se ha pedido «celeridad y rapidez» en la concreción de estas medidas y se ha pedido que «el conglomerado de los grupos que gestionan el centro de Reus no pongan trabas». «Es primordial que se haga rápido», ha dicho el presidente de los republicanos ribereños, Josep Maria Sáez. Sáez también ha exigido que no se haga «política de tierra quemada» desde la gestora Sagessa y sus filiales en este proceso de repliegue. «Sobre todo que regularicen todos las contratos precarizados en estos años para que el CatSalut pueda gestionar el hospital en las mejores condiciones posibles», ha dicho.
De hecho, la precariedad laboral de los trabajadores es uno de los principales efectos de la desinversión y el desvío del ahorro de Móra d'Ebre. Hace años que no se los paga los objetivos o se les retribuyen de forma «escasa» y arrastran encara los recortes que, como el resto del sector, asumieron el año 2012. Hay muy personal en precario, a tiempo parcial y con contratos temporales. Ahora saldrán plazas pero quedarán muchas en precario y esperamos que la nueva empresa lo resuelva», ha apuntado Domínguez. El Hospital Comarcal de Móra d'Ebre tiene entre 250 y 300 trabajadores, y asiste la población de la Ribera de Ebro, la Terra Alta, y el Priorat.