El Gobierno define las 47 estaciones del futuro tranvía del Camp de Tarragona y licita los siete primeros vehículos

2026 y 2028. Estos son los años en los que se pondrá en marcha el servicio de la primera y la segunda fase, respectivamente, del tranvía del Camp de Tarragona. El gobierno de la Generalitat ya ha licitado la compra de los primeros siete vehículos eléctricos, correspondientes a la línea que conectará Cambrils, Vila-seca y la estación intermodal, si está construida entonces.

Ayer anunció la ubicación de las 47 estaciones, 10 de las cuales serán intercambiadores con el servicio ferroviario. El tranvía conectará Tarragona con Reus por los barrios de Ponent, la Canonja y Vila-seca, desde donde habrá líneas, por una banda, hacia Port Aventura, Salou y Cambrils, y, por la otra, cabe a la futura intermodal, Reus y el aeropuerto.

La red, con una inversión prevista de 543 millones de euros, tendrá un total de 46 kilómetros y conectará hospitales, facultades de la Universidad Rovira i Virgili, el polígono químico Sur, el Port de Tarragona y otros polos de atracción.

Uno de los puntos que destaca la administración pública del proyecto es «la interconexión entre todos los sistemas de transporte público». Actualmente, la Generalitat calcula que un 18% de las personas del territorio se trasladan en transporte público, mientras que con el tranvía se prevé subir hasta el 25%.

La primera fase tendrá 14 estaciones (15, si está acabada la intermodal) y hará pasar el tranvía por la costa aprovechando el antiguo corredor, adaptado a las características del sistema que se quiere implantar. El recorrido empezará en la actual estación de tren de Cambrils y continuará por el núcleo de las Comes, la estación vieja, el eixample-playa y Cambrils Badia.

También habrá una parada en Vilafortuny. «Nosotros reclamamos otra estación que dé acceso a la avenida Diputación a la altura del Camí del Corralet», pedía el alcalde de Cambrils, Oliver Klein. Más adelante, el itinerario cruzará Salou, donde habrá tres paradas (dos en Ponent y una en el centro) antes de dirigirse hacia Salou-Port Aventura y, después, a Vila-seca y a la intermodal.

La redacción del proyecto constructivo acabará a principios del 2024, mientras que la intención es empezar las obras a finales del 2026. Con respecto a la segunda fase, el departamento de Territorio ha aprobado recientemente el estudio informativo del trazado, que en los próximos días iniciará el periodo de exposición pública.

Ferrocarriles de la Generalitat de Catalunya, que será el operador del servicio, publicó ayer el concurso público para la construcción, el suministro y el mantenimiento en 15 años de siete tranvías eléctricos, por un total de 48 millones de euros.

Los vehículos tendrán una longitud máxima de 40 metros y una capacidad para 210 personas. También estarán adaptados a personas con movilidad reducida y contarán con un mínimo de 52 asientos, con zonas multifuncionales para bicicletas o cochecitos.

Segunda fase
Con respecto a la ciudad de Tarragona, el tranvía entrará a través de la N-340. En su paso por los barrios de Ponent, penetrará por otro ramal en el interior de Bonavista, Campclar y Torreforta. La línea pasará por la avenida de Roma hasta llegar junto a la plaza Imperial Tàrraco, donde se encuentra ubicada la estación de autobuses. La línea tendrá dos paradas en la avenida de Vidal y Barraquer antes de llegar a la estación de tren vía calle del Mar.

Y, por otro lado, continuará por las ramblas de Lluís Companys y de Francesc Macià antes de llegar al Hospital Joan XXIII y, después en Sant Pere i Sant Pau y el Campus Sescelades. También irá hacia la Part Alta pasando por la avenida Catalunya.

Por otra parte, en Reus la línea del tranvía tendrá un recorrido perimetral. De esta manera, hará una circunvalación en el centro, con paradas en la estación de tren, la plaza de la Llibertat y la plaza de las Oques, entre otros. El tranvía también conectará con el Tecnoparc, el Campus Bellissens de la URV y el Hospital Sant Joan, aparte del aeropuerto.

También pasará por los paseos de Prim y de Sunyer. Fuentes municipales de Reus señalan que el itinerario es un punto que «todavía se tiene que trabajar técnicamente y que se resolverá en el proyecto constructivo que se iniciará pronto».

A su vez, el alcalde de Tarragona, Pau Ricomà, agradeció «la apuesta de la Generalitat por el Camp de Tarragona». Además, añadió que la cohesión del territorio y la movilidad sostenible son dos de los principales aspectos en los que da respuesta el proyecto. El tranvía será una alternativa más de transporte para los 334.881 habitantes del área metropolitana y para los 3,6 millones de turistas anuales.

«La articulación de esta red es un reconocimiento de esta área metropolitana a todos los efectos», manifestó el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès. «Es una solución a los desplazamientos diarios», resumió el consejero de Territorio, Juli Fernández. La Generalitat calcula que 9,5 millones de viajeros al año puedan disfrutar del servicio.

El sistema, en contar con un trazado independiente de la red ferroviaria en servicio, podrá adoptar el ancho estándar europeo y ofrece más posibilidades a la hora de adquirir el material móvil y gestionar el servicio. Es un sistema integrado al entorno, que dispondrá de tramos sin catenaria en los ámbitos densamente poblados.