La entrada a Tarragona por la N-240 tendrá un paso de cebra con un semáforo

La entrada a la ciudad de Tarragona por la carretera de Valls, la N-240, tendrá un paso de peatones con semáforo para conseguir una mayor permeabilidad para los peatones cuando tengan que dirigirse desde la zona del hospital Joan XXIII al barrio de Sant Pere i Sant Pau.

Según ha apuntado el consejero de Movilidad del consistorio tarraconense, Xavier Puig, «el gobierno de la ciudad es consciente de la necesidad de arreglar la entrada de Tarragona por la carretera de Valls. En este sentido, el Plan Parcial 1 y el Plan Parcial 30 de Pou Boronat son dos grandes oportunidades para hacerlo».

Puig ha explicado que, a partir del desarrollo urbanístico de la zona y «de acuerdo con los requerimientos del Ayuntamiento, será el Plan Parcial 1 el que, en su propia urbanización, instalará este paso de peatones con semáforo que conectará a Sant Pere i Sant Pau con el entorno de Joan XXIII».

De esta manera, se dará respuesta a una histórica reivindicación de los vecinos del barrio de Sant Pere i Sant Pau. El presidente de la Asociación de vecinos La Unió de este barrio, Gabriel Muniesa, ha valorado muy positivamente esta intención del Ayuntamiento tarraconense.

«Actualmente, para traspasar la carretera desde nuestro barrio e ir hasta la zona de Joan XXIII, un hospital público donde acude mucha gente, tienes que dar una vuelta muy larga para ir al paso elevado ubicado más al norte, delante de la entrada de la escuela Estela y el colegio de Pràctiques», explica Muniesa.

A esto se le añaden los estudiantes, profesores o personal de administración de la URV que viven en torno al hospital y que tienen que ir al Campus Sescelades. «Muchos de ellos prefieren cruzar la carretera y saltar la mediana, con dos carriles de subida y dos de bajada, lo que supone un peligro importante». Es por eso que Muniesa está muy satisfecho con este compromiso del consistorio.

Por su parte, el presidente de la Asociación de Vecinos de Sant Pere i Sant Pau, Luís Trinidad, también había propuesto esta solución de paso de peatones con semáforo para evitar los posibles accidentes y atropellos que puede suponer que la gente salte la mediana de la carretera para pasar de una zona a la otra. Trinidad, sin embargo, no se queda sólo con eso, sino que también reivindica «una acera en condiciones para que los peatones puedan circular sin peligro y con comodidad».

Desde el Ayuntamiento, el consejero de Movilidad, Xavier Puig, ha apuntado que, «efectivamente, se trata de uno de los semáforos más importantes que tenemos por delante con el objetivo de dar prioridad y seguridad a los peatones, algo que es muy importante para el gobierno de Tarragona».

Además de los presidentes de las dos asociaciones de vecinos del barrio, muchos ciudadanos, a nivel particular, han publicado en las redes sociales varias quejas por esta falta de conexión entre las dos zonas para los peatones. Se sienten «marginados» y apuntan que «también somos de Tarragona, aunque no vivamos en el centro».

Con este compromiso, pues, el Ayuntamiento dará respuesta a una demanda largamente reivindicada y pone solución a los endémicos problemas de conexión entre el centro y los barrios que hay en Tarragona.