El Ayuntamiento apuesta por convertir el Jaume I en un aparcamiento municipal

Lo que tenía que ser el aparcamiento inteligente de la ciudad podría acabar convirtiéndose en un aparcamiento soterrado convencional. Esta es la apuesta que hace el Ayuntamiento de Tarragona para intentar aprovechar la construcción del aparcamiento de Jaume I después de que la estructura nunca haya llegado a funcionar. Tal como aseguró el conseller de Servicios Centrales del Ayuntamiento de Tarragona, Jordi Fortuny, el sistema «es un fiasco» y hay que apostar por una nueva propuesta. Es por este motivo que el consistorio ha estado trabajando en la idea de replantear el espacio y que el aparcamiento de Jaume I se convierta en un parking convencional. «Es evidente que las instalaciones no funcionan, no tiene ningún tipo de sentido», declaraba el conseller. Es por este motivo que el consistorio pone sobre la mesa esta alternativa, la cual quieren que sea «rigurosa y firme». «Es una de las posibilidades más maduras en este momento y con las cuales ya tenemos un proyecto formado», remarcaba Fortuny.

Según Fortuny, el Ayuntamiento podrá hacer uso de las instalaciones «pronto», pero de manera cautelar no se puede hacer «inmediatamente». El conseller señalaba al hecho que su puesta en marcha puede tardar meses, aunque el proceso ya se encuentra en un punto muy avanzado y que «falta que se tome la última decisión, pero con respecto a la ingeniería, el proyecto ya está listo». De hecho, según Fortuny, sólo sería necesario establecer cuál es el sistema de financiación. Las obras de reconversión se harían «en una etapa definitiva, pero que tiene que pasar por la prudencia, ya que nos encontramos todavía en un proceso judicial abierto», apuntaba Fortuny, haciendo referencia al procedimiento mercantil que abrió el Ayuntamiento que se encuentra en el Tribunal Supremo.

En marcha el caso mercantil

En este caso, la empresa de Aparcaments Municipals de Tarragona (AMT) interpuso una demanda contra la empresa Metropolitan y el Banco Santander por la facturación del material que todavía hay en el interior del aparcamiento. «Desde que entramos en el gobierno dijimos que el objetivo era aclarar qué pasó con Jaume I. Esta tarea implicó revisar el proceso de facturas y pagos, identificar una por una cada maquinaria y relacionarla con la factura correspondiente, entre otras acciones. Con todo eso, llegamos a la conclusión de que había facturas pagadas dos veces: la primera a los proveedores que nos suministraban el material y, la segunda, a una deuda vinculada a leasing en el Banco Santander que se ha ido resolviendo a lo largo de los años por un servicio de Metropolitan que nunca se hizo», relataba Fortuny. De esta manera, la AMT pide al Tribunal Supremo que se devuelvan todo este dinero «millonario» que se ha pagado desde el Ayuntamiento. Fortuny recordó que el parking llegó a costar 30 millones de euros al consistorio.

Es por este motivo que el consistorio prefiere ser cauteloso en la puesta en marcha del aparcamiento. Tal como declaraba Fortuny, pondrán a disposición del Tribunal Supremo el material que hay en el interior del Jaume I en forma de «pruebas», acompañado de las facturas correspondientes. «Hay que tener prudencia, ya que tenemos este proceso judicial abierto y entendemos que, en este parking, están las pruebas. Con el fin de sacar adelante las obras no esperaremos hasta la resolución, pero sí al que hayan podido incorporar estas evidencias a la investigación», apuntaba el conseller.

El juez archiva el caso penal

En la misma comparecencia, el conseller dio a conocer la voluntad del Ayuntamiento de recurrir al archivamiento de la causa penal sobre el sobrecoste en las obras del aparcamiento de Jaume I por parte del Juzgado de Instrucción número 3 de Tarragona. El magistrado reconoce «que ha existido un sobrecoste en la ejecución de una obra que se ha revelado como inútil», pero que este aspecto ya se analizó años atrás y que, por lo tanto, la propuesta del consistorio es «no pertinente por inútil». Para el consistorio, el archivamiento no ha sido plato de buen gusto. De hecho, el conseller de Serveis Centrals acusó al juez de utilizar un peritaje antiguo, sin tener en cuenta una «prueba sustancial», que es el «recorrido del dinero, por si ha habido malversación». Sin embargo, Fortuny valoró que mantienen «la esperanza». «Defendemos los intereses de los ciudadanos», añadió.