ERC se reúne con la CUP para integrarla en el gobierno de Tarragona

«Nos han presentado la propuesta de acuerdos programáticos que ya habíamos estado trabajando conjuntamente durante las negociaciones del verano del 2019. En la reunión de hoy nos hemos comprometido a actualizar algunos de los contenidos que, dos años después y en la situación de pandemia actual, han quedado desfasados», ha indicado la CUP en la nota. El documento lo trasladarán a su asamblea para debatirlo y volverán a hablar con ERC en una nueva reunión prevista por finales de la semana que viene.

Los comunes, firmes

El hecho de que en el encuentro de este jueves al mediodía no se haya invitado a miembros de ECP ha desconcertado a los progresistas, tal como ha podido saber ACN. Sin embargo, han comentado que comprenden que ERC quiera cerrar acuerdos en base al programa de gobierno y están de acuerdo con reunirse con la CUP cuando haga falta, ya sea a dos bandas o a tres.

Lo que rechazan frontalmente son conversaciones a cuatro que incluyan JxTgn. Tal como han repetido estos días tanto desde la coordinadora local como las direcciones de Cataluña En Comúcomo de Podem Cataluña, la entrada «de la derecha» la descartan. Argumentan que los modelos de ciudad son diferentes y consideran que habría discrepancias internas que serían insalvables, como por ejemplo, en la tramitación del nuevo POUM.

Si las posiciones continúan enrocadas -ERC apostando por gobierno con JxTgn y ECP vetándolo-, los escenarios están abiertos. Si los republicanos dan un paso más y rubrican el acuerdo que ya tienen aparaulat con los postconvergentes, los comunes afirman que dejarán el gobierno porque se sentirán «expulsados». En este supuesto habría que ver la posición que adoptarían los progresistas: dar apoyo al ejecutivo puntualmente desde fuera o votar en contra de todas las propuestas. Una decisión que, tal como adelantó este miércoles el portavoz parlamentario de ECPDavid Cid, tendría que tomar la asamblea local.

Por el contrario, si finalmente ERC acaba descartando la entrada de JxTgn, no está descartado que los postconvergentes modifiquen su apoyo casi incondicional al ejecutivo hacia posiciones más críticas. Eso podría hacer tambalear la estabilidad de la corporación, ya que hasta ahora tanto la investidura del alcalde republicano Pau Ricomà como los presupuestos han contado con el apoyo de ERC, ECP, JxTgn y CUP. «Asumimos el riesgo», manifiestan voces del entorno de los comunes.