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Infraestructuras

Los vecinos del barrio de Llevant de Tarragona se alían contra las pantallas acústicas de Adif

Califican el proyecto de «aberración» y quieren poner el foco para que la ciudadanía lo conozca y se convierta en una prioridad política

El primer tramo de pantallas empieza en mitad de la playa de Miracle hasta el Fortín de Sant Jordi.

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Una vez las expropiaciones necesarias para que Adif pueda instalar las pantallas de protección acústicas en la vía del tren de la costa de Tarragona han salido a la luz, los vecinos de la Savinosa, el Miracle y l'Arrabassada, los tramos de la ciudad afectados, han unido fuerzas para tratar de pararlas. Consideran que la colocación de estos muros es «solucionar el problema del tercer hilo y las mercancías por la costa con otro problema» y quieren que el proyecto sea conocido por la ciudadanía. De esta manera, el objetivo es que paralizarlo sea una prioridad política, ya que son conscientes de que sólo los representantes políticos tienen las herramientas para conseguirlo.

La Asociación de Vecinos de la Savinosa es la impulsora de un manifiesto que pretende unir esfuerzos con diferentes colectivos y otras entidades vecinales de la ciudad por luchar contra la instalación de lo que creen que será «un muro que pondrá la ciudad de espalda en el mar». El secretario del AVV Savinosa, Antonio Fernández, lamenta que en su momento se permitiera que la estación del AVE se hiciera «tan lejos» y que entonces las mercancías pasaran por la costa y las personas por el interior. «I ahora tenemos las consecuencias, y es que Adif, para quedar bien, plantea un muro acústico, otra animalada ecológica. Quieren solucionar el problema del ruido con lo que será otro problema», dice Fernández, que añade en este sentido que el único ayuntamiento que de momento ha protestado contra el proyecto ha sido el de Torredembarra. Este afecta en todos los municipios de la zona norte de la Costa Daurada. Precisamente por este silencio, denuncia que no está entre las prioridades del Ayuntamiento de Tarragona evitar la instalación de aqueses pantallas, aunque asegura que desde el consistorio les han comentado que todavía tienen días para presentar alegaciones y que, en este sentido, estarán al lado de los vecinos. Además, añade que «la instalación de este muro la pagarán con dinero público, con nuestros impuestos, y yo prefiero que gasten más en solucionar el problema y hacer que las mercancías pasen por el interior».

Precisamente para que la paralización de este proyecto sea una prioridad del ejecutivo tarraconense han elaborado un manifiesto en contra de las pantallas acústicas, a través del cual quieren que toda la ciudadanía conozca las obras previstas y así poder hacer presión a la clase política. «Al fin y al cabo es un problema que afecta en toda la ciudad, porque todo el mundo viene a la playa en el verano y, además, el muro será el primero que verán los turistas que lleguen en tren. ¿Así es como queremos vender la ciudad? ¿Con playas preciosas, pero detrás de este muro?», critica Fernández, que señala que hay otras maneras de reducir el ruido de los trenes de mercancías, como «que reduzcan la velocidad, al menos en las áreas urbanas». El secretario de la Asociación de Vecinos de la Savinosa ponía sobre la mesa, también, el peligro que supone que «pasen trenes de 750 metros de longitud con productos peligrosos por la ciudad» y que ahora se quiera multiplicar el tráfico por seis, ya que las vibraciones también aumentarán y pueden afectar todavía más al Anfiteatro romano. ¿«Por qué está en mal estado el Anfiteatro si no? No puede ser que el Ayuntamiento maltrate sus monumentos de esta manera», lamenta Fernández.

Finalmente, sostiene que no se queja para quejarse, es decir, de que «no es una denuncia gratuita, sino que planteemos alternativas». Fernández reitera que los únicos que pueden parar el proyecto de las pantallas acústicas son los representantes políticos, pero es necesaria la presión ciudadana. Por eso, el secretario de la entidad vecinal celebra que en pocos días «ya hemos conseguido que 350 personas se adhieran al manifiesto». Hoy mismo pedirán al consistorio que se ponga manos a la obra y trabaje para evitar que las pantallas acaben siendo una realidad.

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