PP, PSC y Cs plantan al gobierno en la primera reunión sobre el presupuesto

Los grupos municipales de Ciutadans (Cs), Partit Popular (PP) y del Partido de los Socialistas (PSC) plantaron ayer al gobierno de Tarragona (ERC-ECP) en la que tenía que ser la primera toma de contacto entre el ejecutivo local y la oposición en que los primeros presentaban las líneas maestras del presupuesto de 2021 a los segundos. Ningún representante de estas formaciones asistió a la reunión y los tres se ausentaron por los mismos motivos: el gobierno no les ha hecho llegar ni un documento donde se recojan las previsiones presupuestarias de 2021 y, además, las pocas cifras de que tienen constancia las han conocido a través de la prensa.

A pesar de la indignación de buena parte de la oposición, el gobierno de ERC-ECP podría finalmente no necesitar otros apoyos diferentes de los que tuvo para aprobar el presupuesto de 2020: la CUP se muestra ahora abierta a la negociación y Junts per Tarragona se inclina por votar a favor de una propuesta realista de presupuesto teniendo en cuenta la situación excepcional que se vive por la pandemia.

«Hemos decidido no ir a una reunión donde no hay nada para debatir. No tenemos ningún borrador, nada de nada. Podemos decir que, un año y medio después de su entrada al gobierno, no tienen capacidadpara elaborar y para dar a Tarragona un presupuesto digno», dice la concejala de Ciutadans Sonía Orts. El edil asegura que el gobierno tiene previsto negociar un presupuesto de 2021 «en que, aparte de las indispensables, como las inversiones o el capítulo 1 de personal, todas las partidas del gasto corriente están a cero».

«No hay dinero, pero en el resto de municipios también sufre la pandemia y en ayuntamientos donde gobierno ERC, como Lleido Reus, se han presentado presupuestos, ¿por qué en Tarragona, no?», dice Ortsquién añade que, en una conversación ayer con el concejal de Serveis Centrals, Jordi Fortuny, este le había asegurado que la reunión de ayer se hacía con los técnicos municipales a fin de que estos resolvieran las dudas que plantearan los grupos de la oposición. «¿Las dudas sobre qué? Nos convocan a una reunión sobre un tema que ni siquiera han puesto encima de la mesa. Las dudas que tenemos son precisamente los presupuestos», apuntaba Orts ysentencia que «la ciudad de Tarragona necesita unos presupuestos dignos y un gobierno con capacidad para elaborarlo».

El PSC rechaza la foto

En la misma línea que Ciutadans se manifestaba el PSC. «Necesitamos algún documento, no tenemos ninguna información y, si lo único que veníamos a hacer es que nos explicaran la dificultad en elaborar un presupuesto, que no está concretada la aportación del Estado y, encima, vienen los técnicos a hacer de escudo, eso es poco serio», dice la portavoz socialista, Sandra Ramos.

La edil de los socialistas afirma tener la sensación de que la reunión convocada ayer era sólo una excusa para «hacer la foto » con la oposición y que no se pueda decir que no se habla de los presupuestos». En este caso, añadía, «nosotros no jugamos a estas cosas». De la misma manera que lo ha hecho Sonia Ors, Ramos apela a mirar el ejemplo de otras ciudades. «Todos los municipios tienen presupuestos, ¿qué tiene Tarragona de especial?», se pregunta.

El proyecto de presupuestos de 2021 se tendría que debatir en el plenario de diciembre. «Teniendo en cuenta que se abre un periodo de treinta días para alegar, con este paso llegamos hasta febrero», calcula el portavoz de los populares en el Ayuntamiento de Tarragona, José Luis Martín, que tampoco asistió a la reunión convocada ayer.

«Que den un paso al lado»

«No tenemos ningún documento ni ningún borrador porque no los tienen hechos y eso es muy grave en un año tan importante como este. Es preocupante», afirma Martín. El concejal del PP lamenta haberse enterado también de las «líneas maestras» del presupuesto por la prensa, antes de la reunión de ayer, mientras la oposición sigue sin ninguna propuesta escrita y en firme. «Si tan difícil encuentran las cosas –refiriéndose a la elaboración del presupuesto– que den un paso al lado y que dejen que gobiernen otros», finaliza.

A diferencia del resto, representantes de Junts per Tarragona y de la CUP asistieron al encuentro con el gobierno y todo apunta al hecho de que los presupuestos de 2021 podrían salir adelante gracias a estos grupos. Por una parte, porqueel portavoz de Junts per Tarragona, Dídac Nadal, se niega a «hacer política» en pleno contexto de pandemia y, por la otra, porque la CUP, aunque hace una semana se decantaba hacia el «no» a los presupuestos apelando a que el gobierno no había cumplido ninguno de sus compromisos adquiridos cuando facilitaron la aprobación de las cuentas de 2020, ahora se muestra abierta a seguir negociando. «Lo que nos han explicado es lo mismo, más o menos, delo que ha salido en laprensa. Lamentamos que, no podamos conocer todavía el detalle de su previsión, aunque llevábamos desde septiembre pidiendo iniciar la negociación y el seguimiento de los acuerdos anteriores. Esperamos poder conocer este detalle miércoles en la reunión que tenemos la CUP con el conseller Fortuny», explica Laia Estrada.

«Fortuny miente»

«Aunque el concejal Fortuny miente en sus explicaciones públicas, en esta situación de pandemia sería una irresponsabilidad dejar la ciudad sin presupuestos», dice Nadal, dejando avistar un voto favorable y casi incondicional en las cuentas que plantee el gobierno. Según Nadal, Fortuny miente porque «todo el mundo con cara y ojos sabe cómo pueden estar las finanzas: si caen los ingresos, caen los gastos corrientes». «Uno puede decir que habrá cuatro veces más dinero por Cultura, pero sin gasto corriente, invertirás en un teatro nuevo, pero no tienes nada para pagar las actividades», pone como ejemplo. «No sabemos cómo se hará el Carnaval, Tarraco Viva, las fiestas, entre otros. Ya puede decir que habrá más dinero para Sant Magí o Santa Tecla, pero en realidad no tiene ni idea hasta que el Estado no diga con qué dinero rescata los ayuntamientos», dice Nadal en referencia a los anuncios que Fortuny ha hecho a través de la prensa.

«Me niego a hacer política en plena pandemia. Sería extraordinario que cuatro concejales no fueran capaces de sacar adelante un presupuesto realista», avanza Nadal.