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Pierre Grubius

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«Este tour virtual abrirá las puertas del Seminario, un gran desconocido en la ciudad»

Se ha presentado una experiencia immersiva en 3D del Centro Tarraconense El Seminari de Tarragona hecha a partir de las fotografías de Pierre Grubius

El fotógrafo con su cámara Matterport, en una imagen cogida en el Seminario de Tarragona.

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—¿Cómo funciona la cámara que utilizó para recoger las imágenes del Seminario?

—Es un aparato de la marca Matterport, que no sólo hace fotografías en 3D, sino que también es un escáner que permite tomar las medidas de todos los espacios. Con ella vas componiendo un modelo en tres dimensiones y después el programa de inteligencia artificial que tiene esta empresa de los Estados Unidos te monta las fotografías y escaneos, generando a este modelo 3D.

—¿Es por, tanto, untour virtual?

—Sí. Entendiendo que untour virtual es aquel en que tú estás dentro del espacio y te puedes mover, a diferencia de lo que en algunos lugares se presenta como tal, y que en realidad son un conjunto de fotografías en 3D. En el caso del Seminario, puedes por ejemplo subir y bajar escaleras, como si estuvieras allí. La Matterport te da, por lo tanto, la posibilidad de ofrecer una experiencia completamente immersiva. Y con una resolución 4K.

—¿Cómo es el proceso de grabación y montaje de las imágenes?

—Aunque técnicamente no es muy complejo, pasé muchas horas. Hay que hacer muchos escaneos, cada vez que estás en un lugar la cámara gira sobre sí misma y toma, no sólo la foto, sino también las medidas, y va generando como un puzzle y montando todas las piezas. Un espacio pequeño lo haces muy rápido, pero en un espacio grande, como el Seminario, que tiene 7.000 m2 , tienes que tener muchos puntos para que el aparato lo pueda montar. No ha sido un trabajo fácil, tuve algunos problemas de posproducción y tuve que contactar con los Estados Unidos, pero al final se pudo solucionar y pienso que el trabajo ha quedado mucho bien.

—¿Conocía el edificio?

—Cuando era joven estudié cinco años. En su momento, también colaboré utilizando las fotos que se hicieron para pedir fondos, y por lo tanto viví toda la transición desde el Seminario antiguo, que tenía su encanto, hasta el actual. Yo lo encuentro fantástico, mantiene toda la estructura antigua pero la modernidad le da un contrapunto muy interesante. Pienso que mucha gente de la ciudad no lo conoce y, por eso, creí que este tour virtual serviría para abrir las puertas de este espacio tan desconocido todavía a Tarragona.

—¿La luz que hay en el interior del edificio o su falta le acondicionó el trabajo?

—No he tenido ningún problema porque este aparato saca mucho rendimiento en sitios donde no hay demasiada luz. De hecho, no le gusta nada la luz del sol porque, como escanea con infrarrojos, donde hay luz solar no puede leer bien. Hice los escaneos en horas muy concretas y, si uno se fija, verá que a los claustros por ejemplo no toca nunca el sol. Eso nos condicionó el trabajo, porque tuvimos que planificarlo mucho e ir cosiendo las imágenes, no podía saltar de un lugar al otro, sino ir siguiendo una especie de línea.

—¿Era su primer trabajo con la Matterport?

—No, desde el mes de junio que ya lo había utilizado en trabajos para inmobiliarias. Pero un reto como este, con un edificio de estas dimensiones, sí que ha sido nuevo.

—¿Es una herramienta de futuro?

—Estoy seguro. Hoy día todo se vende por Internet y lo que te permite hacer la venta son las imágenes. Además, la gente cada vez se desplaza menos, y en la situación actual todavía menos. En el sector inmobiliario, con quien yo trabajo, tiene la gran ventaja que te permite hacer una visita a la vivienda de manera que los propietarios no tengan que recibir a nadie. Además, te muestra todas las medidas de la vivienda, y por lo tanto el posible comprador puede saber si la casa le encaja o no. De esta manera, las visitas que se hacen después del tour son más precisas, la gente ya sabe qué encontrará y es más probable que se acabe haciendo la venta. Es una herramienta que evita perder el tiempo, tanto al vendedor como al comprador, incluso en las inmobiliarias. Eso también se puede aplicar a museos, escuelas, o cualquier otro edificio público. Por lo tanto, estoy convencido de que esta herramienta es el futuro. De hecho ya está aquí, pero acabará estableciéndose y se irá perfeccionando, porque cada vez habrá más personas que la utilizarán.

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