Diari Més

Conflicto

Los vecinos de la Parte Alta temen que haya más incendios en casas ocupadas

Denuncian que en una vivienda de la calle Ferrers se acumulan colchones y un buen número de bombonas de butano

Una cocina y otros desperdicios, ayer en la calle Ferrers.

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La situación en la Parte Alta por la ocupación de viviendas está llegando a límites preocupantes, según han manifestado vecinos de este barrio tarraconense. La situación «es grave», dijeron ayer a esta redación, y denunciaron que «se pueden producir más incendios, como lo que hubo en un edificio de la plaza de los Sedassos hace dos semanas». Los vecinos, que prefieren mantener su anonimato, afirmaron que en un inmueble de la calle Ferrers «se acumulan colchones y muchas bombonas de butano, y tenemos miedo a que un día se produzca una explosión, ya que nada está en condiciones».

A situaciones como la narrada por los vecinos del barrio se suma la sensación de inseguridad, agravada por hechos como la pelea que tuvo lugar el pasado sábado por la tarde y que requirió la participación de los Mossos d'Esquadra. Los hechos se produjeron en la calle Salinas. La policía autonómica fue alertada de que un grupo de jóvenes se estaba peleando. Según apuntaron testigos presenciales, los protagonistas del incidente fueron menores no acompañados, conocidos como MENA, y un grupo de ocupas. Estos dos colectivos son, según los vecinos de la zona, los causantes de buena parte de la problemática de inseguridad ciudadana que se produce en la Parte Alta y que consideran «se tiene que solucionar cuanto antes mejor y antes de que pase una desgracia».

En los últimos días proliferan en las redes sociales comentarios con relación a los hechos que están succeïnt en este barrio de la ciudad. De hecho, hace tiempo que, de manera reiterada, vecinos de la zona denuncian el aumento de robos a la calle, tanto a personas de la Parte Alta como de turistas de paso que visitan la ciudad. El aumento de la sensación de inseguridad ha yendo creciendo en los dos últimos años.

«Me insultan y amenazan»

Una vecina que comparte edificio con ocupas declaró en esta redacción que está atemorizada y que la vida se ha convertido en una pesadilla desde que tres de las viviendas están ocupadas por personas que «no me dejan vivir y que, con su actitud, han hecho que haya caído enferma». La vecina, que responde a las iniciales E.A, reside en una de las calles de la Parte Alta que en los últimos meses se ha convertir en uno de las más inseguras.

La vecina relató que la semana pasada «una chica me arrancó parte de la piel y tuve que ir al hospital, mientras unos chicos me insultaban». La chica, que hace ocho años que reside en el mismo domicilio, dijo que «los ocupas se hacen las víctimas, si les dices algo, te acusan de racista y, la realidad, es que hacen que la convivencia sea imposible». Además, comentó que «al inicio, cuando ocuparon las casas, fui amables con ellos, pero no hay manera que tengan un comportamiento normal».

Por otra parte, la vecina se ha puesto en contacto con el Ayuntamiento para encontrar una solución a su situación y poder acceder a una vivienda donde su vida sea «tranquila». E.A. afirmó que «nadie me está ayudando, ni los servicios sociales, y lo único que pido es una vivienda de alquiler que pueda pagar». «Toda mi vida he vivido en la Parte Alta y quiero seguir en este barrio, no quiero marcharme a uno que no sea el mío de siempre», recalcó, para añadir que la situación en la que se encuentra «me está constando la salud». E.A. apuntó que «tengo dos enfermedades crónicas, he empeorado a causa de la covid-19 y, también, por la situación que me encuentro por culpa de los ocupas».

Según explicó la vecina, «rompen los cristales, se niegan «a arreglar la puerta que ellos rompieron, por la noche e, incluso de madrugada, hacen mucho ruido, y roban los fusibles del contador de la luz». «Mi salud no está bien y me pueden matar», añadió, para concluir dien que «desde el pasado mes de mayo vivir en este edificio ocupado se ha convertido en un tormento».

Discrepancia por los jóvenes del edificio de Sedassos calcinado

El grupo municipal de la CUP criticó ayer martes la «falta de coordinación entre el Ayuntamiento y la pensión donde se ubicaron los jóvenes migrantes sin referentes familiares después del incendio» que se produjo en un inmueble de la plaza de los Sedassos hace dos semanas. La CUP dijo que, «a pesar del consistorio hizo público a través de las redes que los jóvenes se podrían quedar durante una semana más, esta información no fue notificada a la pensión donde se alojan». Esta formación se mostró ~preocupada» ante «la falta de diligencia, coordinación y buena planificación del Ayuntamiento a la hora de dar una respuesta clara en materia de vivienda a los jóvenes que ocupaban el edificio de la plaza de los Sedassosy que sufrió un incendio el pasado 22 de julio». La CUP recordó que «estamos ante una problemática que todo el mundo está sufriendo, desde el mismos jóvenes como las vecinas del barrio, a causa de la inacción del consistorio».

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