Diari Més

Estado de Alarma

Los sanitarios tarraconenses reclaman equipos de protección contra contagios

El sindicato CATAC-CTS denuncia falta de información desde el Instituto Català de la Salut y los diferentes hospitales

Imagen del Hospital Joan XXIII, donde se ha adaptado la zona C de la sexta planta por|para casos de COVID-19.

Santa Tecla y Juan XXIII adaptan parte de una planta por|para casos de coronavirusGerard Martí

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Los centros sanitarios de Tarragona, en la línea de los de todo el Estado, acusan la falta de material de protección para los profesionales. De esta manera, elementos que según el fabricante no serían reutilizables, se están estirando en varias jornadas. Es el caso de las mascarillas y también se quiere estudiar hacer con la ropa impermeable, según asegura la delegada de CATAC-CTS de la Junta de personal del Hospital Joan XXIII. Ayer los colegios profesionales, tanto el de médicos como el de enfermeras, emitieron un comunicado mostrando su preocupación por las condiciones en las que están trabajando.

«En la actualidad el 16% de los positivos de coronavirus detectados en Cataluña afectan personal sanitario», informan. Eso supone una cantidad aproximada de 3.000 sanitarios. Los equipos de protección y los kits de pruebas diagnósticas, dicen en el texto, «son indispensables para el ejercicio de una buena praxis y se vuelven imprescindibles para evitar el contagio del profesional y, en extensión, el de sus familias». Por este motivo y con el objetivo de parar el número de positivos entre el personal sanitario por falta de material adecuado, el Col·legi Oficial de Metges de Tarragona (COMT) y el Col·legi Oficial d’Infermeres i Infermers de Tarragona (CODITA) exigen a las autoridades sanitarias central y autonómica «la llegada de los Equipos de Protección Individual de forma inminente en los centros hospitalarios donde los trabajadores y trabajadoras sanitarias desarrollan su tarea y donde la principal vía de contagio es el contacto directo con los pacientes; y la llegada de pruebas diagnósticas homologadas de forma urgente y prioritaria al personal sanitario con el fin de evitar la extensión de los contagios a sus pacientes así como a sus familiares».

En una línea similar se expresó el sindicato CATAC-CTS. A pesar de reconocer que la situación es «un poco mejor en Tarragona que en el resto de centros del ICS,» Marina Roig explicitó que «el único material que nos ha llegado es la ropa impermeable». Esta ropa, de momento, no se está reutilizando después de todo un día, pero sí que se está estudiando a través de la «reesterilización». Lo que sí que se estira su uso es con las mascarillas y el resto del Equipo de Protección Individual (EPI). Desde el pasado 16 de marzo, se quejan por la reedición «constante» de los protocolos. La situación, señala Roig, «genera cierta angustia a los trabajadores» ya que aparte de poder contagiarse «somos un eje de transmisión».

En el Hospital Joan XXIII «las UCI están llenas» y afirma que a pesar de la habilitación de más camas «por mucha estructura que tengamos, si no tenemos profesionales no podremos hacer nada». En este centro hace diez días los informaron desde la dirección de que había habido tres contactos positivos de profesionales y, desde entonces, no les han actualizado la información.

Esta demanda de información es también comuna en las Terres de l'Ebre. Cinta Sarroca, delegada sindical también de CATAC-CTS, explica que hay EPI pero «van ahorrando mucho». Reclaman un seguimiento de «cómo están de material, si están pendientes de que llegue,» pero hasta ahora lamentan que tan sólo les han llegado instrucciones de los cambios de protocolo de actuación. En el comunicado el sindicato considera que «los protocolos son una trampa legal para autoprotegerse la empresa a la vez que se desprotege a los trabajadores y trabajadoras del sistema. El alto grado de contagios de personal viene dado de la falta de material para poder protegernos. No es cierto que en Cataluña el problema de la falta de material lo tenemos resuelto. El material llega día a día y es totalmente insuficiente. Cuando en China el índice de contagios de personal sanitario era del 2% nosotros ya estamos al 17%», detallan. Añaden que el material tiene que ser «de un solo uso para cada procedimiento y turno de trabajo», una circunstancia que ahora mismo no se estaría cumpliendo. Aparte, destacan que todo es herencia de los recortes en el sistema sanitario durante los últimos años.

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