La nueva ordenanza establece que las entidades de Tarragona tendrán que compartir locales

Disponer de un local municipal como si, casi, fuera de propiedad , es una de las prácticas con las cuales quiere acabar el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Tarragona (ERC-ECP). Así lo contempla el borrador de la nueva ordenanza de cesión temporal de uso destinada a entidades sin ánimos de lucro. El Ayuntamiento tiene en régimen de cesión 71 locales, de los cuales la inmensa mayoría son utilizados por sólo una entidad. Hermán Pinedo, concejal de Patrimonio, Juventud, Cooperación y Vivienda, manifestó en esta redacción que, en Tarragona, «hay más entidades que locales y, por lo tanto, aquellos de que disponemos se tendrán que compadecer». Uno de los objetivos que se persigue es «optimizar» las dependencias municipales que se ceden a entidades sin ánimo de lucro.

La futura ordenanza «establecerá cuánto tiene que pagar el Ayuntamiento y cuánto las entidades para el mantenimiento del local, como por ejemplo el consumo de luz y agua». «Las entidades tendrán que asumir una parte», remarcó Pinedo, quien apuntó que «los grupos municipales ya disponen del borrador y nuestro objetivo es llegar a un consenso antes de aprobarlo».

El pasado enero, cuando el borrador empezaba su recorrido, Pinedo afirmó que «hasta ahora, desgraciadamente, los locales se daban a dedo, según la directriz del político de turno, y la intención de esta ordenanza es poner fin en eso». De hecho, son escasos los locales que, actualmente, están compartidos por más de una entidad, como sucede en el Edificio Torre Perú de Sant Pere i Sant Pau, donde tienen la suya suyo la emisora de radio del barrio y la Asociación de Vecinos Zona Norte, o uno de la calle Riu Montsant, destinado a la Asociación de Vecinos Torrenova y el Colectivo de Mujeres de Torrenova. En la gran mayoría de los casos, cada uno de los locales corresponde a una única entidad, hecho con el cual quiere acabar la nueva ordenanza. Un caso excepcional es el del edificio de la antigua Facultad de Letras, en la plaza Imperial Tarraco, donde tienen la suya suyo en locales municipales hasta seis entidades.

El borrador establece que, «conforme el principio básico de optimización de los recursos municipales, la cesión del uso se realizará de forma preferente en régimen de uso compartido entre dos o más entidades, siempre que las características del local lo permitan y sus actividades sean compatibles, a criterio del Ayuntamiento».

Plazo de cuatro años

Con respecto al plazo máximo de duración inicial de la cesión de uso, este será de cuatro años, a contar desde la fecha del otorgamiento de la autorización. El borrador indica que, de manera «excepcional», la duración de la cesión «podrá ampliarse mediante una prórroga, sin que la total pueda exceder a la del plazo inicial». Además, «en los casos de cesión que incluyan la realización de obras de reforma de los elementos e instalaciones interiores del local a cargo de las entidades por un importe superior a 6.000 euros, el plazo de duración se podrá ampliar por un periodo superior, en atención a las condiciones del proyecto, amortización de las obras y a la continuidad en el tiempo».

Se mujer la circunstancia de que hay entidades que el vencimiento del local es a largo plazo, hasta 15 y 30 años, en algunos casos, con vencimientos los años 2027, 2032, 2038 o 2047, para poner unos ejemplos, e incluso hay que no tienen especificado el plazo. En algunas circunstancias, la renovación se hace año tras año. Actualmente, las cesiones de locales municipales a las entidades están paralizadas a la espera de qué se apruebe la ordenanza municipal.

Las entidades que compartan local «tendrán que designar a un único interlocutor con el Ayuntamiento» y se establecerá «de forma expresa y clara el sistema de distribución de las cargas derivadas del mantenimiento, consumo, tasas, seguros, fianzas y cuotas comunitarias, si procede, entre las entidades usuarias». Por otra parte, las discrepancias que puedan existir entre las diferentes entidades, con respecto a la interpretación de las normas de uso interno, serán dirimidas por el Ayuntamiento, en su calidad de titular del local.

Criterios técnicos

Herman Pinedo defiende que el reparto de los espacios municipales a las diferentes asociaciones ciudadanas se hará con «criterios puramente técnicos». La idea es que las entidades presenten las actividades que querrán llevar a cabo en el local y, entre otras condiciones, se tendrá en cuenta que no tengan otro espacio. Pinedo remarcó que «las que ya están instaladas tendrán prioridad, dentro de un plazo lógico, para adaptarse a la nueva normativa» y la finalidad «el objetivo es repartir los locales con justicia». Además, apuntó que las entidades que ya tienen local lo podrán mantener, siempre que cumplan las condiciones reguladas por la ordenanza, mientras las que no tengan «podrán acceder a uno», dijo al concejal d'En Comú Podem.