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La ciudad romana centrará la 21ª edición de Tarraco Viva

El festival de Tarragona quiere impulsar que los jóvenes se integren en los grupos de recreación histórica

Los impulsores de Tarraco Viva con el cartel de la 21 edición del certamen.

Los impulsores de Tarraco Viva con el cartel de la 21 edición del certamen.Gerard Martí

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La ciudad romana y el mundo urbano serán los protagonistas de la 21ª edición del festival de recreación histórica Tarraco Viva, que se celebrará en Tarragona del 5 al 19 de mayo. Contará con 427 actos y 139 actividades diferentes, entre las cuales destacan una reproducción de la vida en el Foro de Tarraco que se podrá ver en el Palau Firal, la simulación de unas elecciones romanas y la fundación de una ciudad. La edición de este año contará con un presupuesto de unos 380.000 euros, ligeramente superior al de los últimos años, y tiene como objetivo fomentar la presencia de estudiantes en los grupos de recreación histórica que participan en el certamen mediante el impulso de actividades en los institutos.

El acto inaugural será el domingo 5 de mayo por la tarde en las murallas de Tarragona. El director del festival, Magí Seritjol, ha explicado que quieren que este primer acto cada año sea en un espacio patrimonial diferente y que en esta edición han escogido las murallas «porque es lo primero que se construía en una ciudad, era la inauguración de la ciudad romana». En concreto se hará en la Torre de Minerva, «la primera construcción romana en la península Ibérica», un hecho que enlaza con la voluntad de este año de tratar la vida en las ciudades y exponer como era el mundo urbano en la Antigua Roma. Como ya es habitual, Tarraco Viva también impulsa la recreación física de algún espacio o elemento de aquella época. Este año será el Foro romano, que se situará en el Recinte Firal del Palau de Congressos, con el cual los visitantes podrán hacerse una idea de cómo era «el corazón y lugar de encuentro de la ciudad», y encontrarán «como se hacían negocios, manifestaciones, política, juicios, intercambios, reuniones...» ha detallado Seritjol. El otro gran espectáculo del festival será el de clausura, previsto para el domingo 19, y que simulará unas elecciones, aprovechando que el fin de semana siguiente serán los comicios municipales y europeos. «Explicaremos cómo se votaba en la época romana», ha informado el director, que ha ironizado que «todavía no sabremos quién será el alcalde de Tarraco». Este espectáculo también se realizará en el Palau de Congressos.

Además, también habrá los ya tradicionales gladiadores, monólogos teatralizados, juegos infantiles, conferencias, visitas teatralizadas o talleres de gastronomía romana. En total serán 427 actos para todos los públicos: «Más o menos los mismos que los últimos años, es una buena medida para nosotros», ha especificado Seritjol.

Una de las acciones en las cuales trabaja el festival está en el fomento de los grupos de recreación entre los estudiantes de ESO y Bachillerato. «Tenemos mucha gente implicada en la recreación histórica pero queremos generar interés entre la gente joven, y eso nos permitirá generar plantel», ha expuesto a la concejala de Cultura del Ayuntamiento de Tarragona, Begoña Floria. Seritjol ha concretado que desde este año ya se pone en marcha un proyecto con institutos de la ciudad por los cuales los alumnos «harán guiones de recreación histórica» y uno o dos de estos trabajos tendrán el premio de poder representarse en la edición del próximo año de Tarraco Viva. «Es una gran herramienta pedagógica porque se tienen que buscar las fuentes en las bibliotecas y en los archivos, hablar con arqueólogos, hacer vestuario, construir el material... aprenderán muchas cosas, no sólo historia», ha completado el director del certamen. Con eso quieren conseguir que la historia «no sea una obligación curricular, sino que tenga alma y que enganche» y Seritjol ha apuntado que «tenemos que trabajar mejor las generaciones que suben y eso es una vía para abrir camino».

En esta línea Floria ha apuntado que «hacemos una apuesta fuerte por el patrimonio y el conocimiento, que son dos pilares fundamentales, y con la divulgación cerramos el círculo». Ha expuesto también que «somos de las ciudades que mejor sabemos explicar la historia y el legado romano» y por esta razón el festival trabaja desde hace años con la creación de nuevos formatos, como los monólogos teatrales a partir de textos antiguos. Seritjol considera que la dramaturgia, «que la inventaron los griegos hace 3.000 años, nos sirve para llegar a nuevos públicos», a veces incluso «mejor que las nuevas tecnologías». El director ha asegurado que «la innovación no es sólo tecnología» y ha afirmado: ¿Podemos innovar en las visitas guiadas? Sí. Y nos podemos especializar y ser abanderados en eso». En cuanto a la interpretación del patrimonio, asegura que «hay un futuro inmenso en nuestra ciudad y lo tenemos que liderar. Somos la capital arqueológica del país y le tenemos que sacar rendimiento social y económico» ha enfatizado.

El presupuesto de esta 21ª edición será en torno a los 380.000 euros, unos 40.000 euros más que el año pasado. La gran parte, 285.000, los aporta el Ayuntamiento de Tarragona, mientras que la Diputació de Tarragona pone 70.000 más. Floria se ha lamentado de que «la aportación de la Generalitat de este año es darnos ‘cariño’», si bien ha excusado el Gobierno por el hecho de que «no tienen presupuesto y no hay dinero». «Es un tema técnico y no hago una crítica política», ha completado. A pesar de eso, Seritjol ha reconocido que esta situación «amenaza actividades».

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