Infraestructuras
El Ministerio de Fomento traspasa siete kilómetros de vías urbanas al Ayuntamiento de Tarragona
En una segunda fase, el consistorio pedirá al Estado que le ceda el resto de tramos
El nuevo radar no soluciona la problemática al A-7 con respecto a accesos y salidas
El Ministerio de Fomento ha acordado el traspaso al Ayuntamiento de Tarragona de 7,3 kilómetros de vías urbanas de los 24 kilómetros que actualmente son competencia del Estado. Según informa el consistorio, se trata de carreteras de titularidad estatal que, con los años, se han convertido en vías urbanas porque han sido absorbidas por el propio crecimiento y expansión de la ciudad. Los viales aglutinan el tráfico urbano de Tarragona y el Ayuntamiento ya está haciendo la conservación y el mantenimiento y, hasta todo, la regulación de usos. Los traspasos no van acompañados de transferencias económicas a favor del consistorio.
El plenario del próximo lunes dará cuenta de la resolución de la Unidad de Carreteras del Estado del Ministerio de Fomento. La medida afecta a los tramos de la carretera N-240 que transcurren por la avenida de Andorra entre la plaza Imperial Tarraco y la rotonda de la avenida de Catalunya- y por la carretera de Valls hasta el puente que cruza sobre la autovía A-7.
Con respecto a la N-340, se incluye la avenida de Roma, diferentes tramos de la Via Augusta y de la carretera de Valencia, así como la carretera Vella de Valencia desde la rotonda de acceso al Polígono Francolí en la rotonda de CLH.
Otros tramos que quedarán en manos del consistorio son la curva Voramar, los accesos a Cala Romana y a la Ciudad Residencial, los márgenes de la rotonda de la carretera del Catllar, el paseo de la Independencia -desde la avenida de Roma a la avenida Ramón y Cajal y hasta Torres Jordi-, desde Torres Jordi hasta el límite del sistema portuario, la circunvalación de la Floresta, diferentes tramos de la T-11 como la plaza de Europa y desde la carretera del Cementerio en las rotondas norte y sur.
Una segunda fase bisiesta y un aparcamiento disuasivo
Además de estos tramos, el Ayuntamiento de Tarragona está negociando una segunda fase de cesiones que incluiría el resto de tramos que se han convertido en red vial urbana, como la N-240, de la plaza Imperial Tàrraco hasta Sant Salvador, o las antiguas carreteras de Valencia y Barcelona.
Por otra parte, el Ministerio de Fomento también cede al Ayuntamiento una finca de 5.528 metros cuadrados incluida dentro del Plan parcial de la Horta Gran, en la entrada en la ciudad desde Ponent, donde el Ayuntamiento implantará un nuevo aparcamiento municipal disuasivo.