Un vecino del Serrallo denuncia aguas fecales en la calle desde hace quince días

José Manuel Oliveira, propietario de un establecimiento de restauración de la calle Sant Andreu, en el barrio del Serrallo, denunció ayer a esta redacción que hace más quince días, que, desde los bajos de un inmueble localizado cerca de su local, situado en la acera contraria, salen aguas fecales a la vía pública. El punto de incidencia es «un almacén que está vacío, en el cual el propietario bien mucho de vez en cuando». Oliveira manifestó que la presencia de aguas fecales en medio de la calle y el olor que desprenden «perjudican los vecinos, las personas que venden en el barrio y en los establecimientos comerciales de la zona».

Oliveira decidió denunciar este hecho a esta redacción «porque va dos semanas que lo hago al Ayuntamiento y a la Guardia Urbana, pero no llega la solución a un problema que también es sanitario». El propietario del restaurante apuntó que, incluso, «he informado los agentes de la Guardia Urbana que vienen al barrio, pero la única respuesta que he obtenido hasta el momento es que se abrirá un expediente». «Ayer –para el miércoles– llamé al 112, me dijeron que harían una diligencia y que me llamarían, pero todavía no lo han hecho». «Parece que nadie quiera poner solución a esta situación tan lamentable que, además, no es la primera vez que sucede», subrayó.

Mientras el agua fecal se dirigía hacia el sumidero situado en el centro de la calle Sant Andreu, el olor se hacía más presente. «A veces sale más, o menos, en función de la utilización de agua que hacen los vecinos», dijo Oliveira, quien remarcó que «el origen del problema se encuentra en el almacén, que es el lugar por donde sale el agua». Esta situación «hace años que dura», pero de manera desigual. «Ahora hace quince días que no deja de salir el agua fecal», apuntó Oliveira. Según este profesional del Serrallo, «el almacén hace unos veinte años que está así, presenta un estado de insalubridad y, en su interior, hay ratones».

En opinión de este profesional del sector de la restauración, «el almacén –situado en el número 8 de la calle Sant Andreu– es privado, pero como la afectación es en la vía pública, el Ayuntamiento tendría que adoptar una solución». Oliveira remarcó que «el Serrallo es un barrio muy turístico y no puede ofrecer esta imagen».