​Desarticulado en Tarragona un clan serbio que se dedicaba al tráfico de marihuana

La Guardia Civil en colaboración con la Guardia Urbana de Tarragona han detenido siete personas de nacionalidad serbia, como presuntos integrantes de una organización criminal intencional relacionada con el cultivo de cannabis. Se ha hecho a tres registros, en los cuales se ha decomisado 3.300 plantas de marihuana, 3,5 kilos de esta sustancia preparada para ser envasada al vacío, 8,5 kilos de restos de esta planta para la fabricación de aceite de hachís y más de 3.000 euros en efectivo.

La organización criminal estaba perfectamente estructurada y organizada y teníaa suservicio varias personas dedicadas exclusivamente al cuidadoy vigilancia de los cultivos. La bandahabía alquilado varios inmuebles, en los cuales ocultaban las plantaciones 'indoor' de cannabis.

Al principio de año, la Guardia Civil conoció que miembros de un importante clan serbio establecido en la provincia se estaba dedicando a alquilar inmuebles en varias poblaciones de la provincia con la finalidad de establecer los cultivos de marihuana.

A raíz de esta información y de las investigaciones llevadas a cabo, se pudo ubicar los domicilios donde parecía que se podrían estar cultivando y elaborando sustancias estupefacientes. Estas viviendas no tenían actividad cotidiana, a pesar de tener un consumo eléctrico de una actividad industrial. Este hecho hizo pensar que se había alquilado exclusivamente para habilitarlo para el cultivo de marihuana, así como por|para su manipulación y distribución.

Durante la mañana del día 2, se llevó a cabo un operativo conjunto entre la Guardia Civil y la Guardia Urbana de Tarragona. En las entradas que se hicieron, los agentes vieron que las viviendas se habían compartimentado en diferentes estancias para acoger la infraestructura necesaria para cada una de las fases del cultivo, una para depositar el material de cultivo, otra para la producción industrial de cannabis, el secadero de la sustancia y el almacenaje y envasado de esta.

Durante el registro también se descubrió que los inmuebles estaban conectados de manera fraudulenta a la red eléctrica.

A los detenidos, siete hombres de nacionalidad serbia de entre 20 y 40 años, se los imputan delitos de organización criminal, tráfico de drogas y fraude en el fluido eléctrico. Después de la detención quedaron a disposición judicial. El Juzgado decretó prisión sin fianza para dos de ellos y al resto, libertad con cargos y la retirada del pasaporte.