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Laboral

La plantilla del Hospital Sant Joan de Reus denuncia cambios en las condiciones laborales

Unas 600 personas participaron en la asamblea de ayer y el comité presionará a la dirección para evitar que se implementen

L'assemblea de treballadors celebrada ahir a l'Hospital de Reus.

La plantilla del Hospital Sant Joan de Reus denuncia cambios en las condiciones laboralesCedida

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Los trabajadores del Hospital Sant Joan de Reus denuncian que la empresa les quiere modificar sus condiciones laborales. Adoración Balmaseda, presidenta del comité de empresa, explica que «la empresa nos comunicó el viernes pasado la intención de modificar las condiciones de trabajo» aparte de la plantilla, afectando sobre todo a la planificación de las personas afectadas. Balmaseda asegura que, aunque las intenciones de la dirección se encuentran «dentro de la legalidad», ya que «se escudan en el artículo 41 del Estatuto de los Trabajadores», el cual «permite a cualquier empresa modificar las condiciones laborales de los trabajadores alegando causas organizativas o productivas». Sin embargo, insiste en que «desde el comité de empresa no estamos de acuerdo con esta modificación». A pesar de esta desavenencia, señala que el estatuto «obliga al comité a negociar» con la empresa. En esta línea, ya ha sido creadauna comisión de negociación con la participación de 26 personas: 13 representantes del comité de empresa y 13 más de la dirección del centro.

Hoy se inician las reuniones de negociación, las cuales durarán quince días, pasados los cuales «se puede o no llegar a un acuerdo», señala Balmaseda. El proceso de negociación se verá afectado según las propuestas que vayan presentando ambas partes y podría comportar que las modificaciones en las condiciones afectaran menos personal o que sólo lo hicieran de forma temporal, por ejemplo.

En dos semanas, pues, con o sin acuerdo, la empresa «comunicará la decisión a los trabajadores afectados», ya que «la empresa ya nos ha dicho que sío síse aplicarán» los cambios, señala Balmaseda. Dada esta situación, cada trabajador podrá o bien aceptar las modificaciones y seguir trabajando bajo estas, o bien rechazar los cambios y marcharse o denunciarlos. Habiendo concluido las negociaciones, y en caso de que el comité de empresa no estuviera de acuerdo con el resultado final, los mismos representantes sindicales también podrían denunciar la empresa.

Balmaseda explica que la propuesta hecha desde cuyo hospital parte la negociación que se inicia hoy afectaría «de maneras diferentes» a las jornadas laborales del personal del centro. Por una parte, la intención de la empresa es modificar el horario laboral de los médicos, los cuales actualmente trabajan cinco días a la semana de 8 a 17 horas. La propuesta trasladada el viernes pasado al comité representaría que trabajarían de 8 a 15 h. cuatro días de la semana, y el quinto lo harían de 8 a 20 h. Con respecto al resto del personal, la presidenta del comité señala que son principalmente «cambios de ritmo de semana», modificando así los turnos en los cuales tendrán que trabajar con respecto a la planificación actual. En esta misma línea también se prevén cambios con respecto a los fines de semana, pero «no los unifican en todos por igual», así como cambios en los festivos en los cuales cada profesional puede librar. Balmaseda señala que «en algunos los beneficia y en otros los perjudican los cambios.

Con motivo del inicio de las reuniones, ayer tuvo lugar una asamblea de trabajadores en la cual participaron unas 600 personas en dos sesiones con el fin de abarcar los diferentes turnos. En esta reunión, los representantes sindicales explicaron la situación actual así como la propuesta concreta que hizo la dirección la semana pasada. Delante de eso, la plantilla concluyó presionar a la empresa para evitar que se apliquen las modificaciones anunciadas. Desde el comité de empresa lamentan estas decisiones por parte de la dirección, ya que aseguran que «afectarán a la calidad asistencial que recibirá la población» que acuda al centro, y exigen al CatSalut «una gestión de la sanidad y de los trabajadores» que esté «a la altura de lo que se merecen los pacientes».

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