Diari Més

Estado de Alarma

El CMQ de Reus tiene 20 contagiados por COVID-19 y trabajadores aislados

Por otra parte, el Ejército desinfectó ayer la Residencia Vila-seca, donde hay 61 infectados y se han registrado 7 muertes

Momento de la llegada del Ejército español a la Residencia Vila-seca para desinfetcarla.

El CMQ de Reus tiene 20 contagiados por COVID-19 y trabajadores aisladosOlívia Molet

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El Centre Mèdic Qirúrgic de Reus (CMQ) tampoco se ha salvado del coronavirus y, según confirmaron ayer fuentes del Departamentde Salut a DiariMés, 20 pacientes han dado positivo por COVID-19 y, en consecuencia, algunos profesionales están en cuarentena a la espera de obtener los resultados de las pruebas. Los 20 pacientes se encuentran confinados en un área específica del centro, la mayoría con sintomatología leve, y se han incorporado profesionales para cubrir los que están de baja.

El CMQ puso sus instalaciones a disposición de Salut por si fuera necesario hace unas semanas y, el pasado día 30 de marzo, parte de la planta de sociosanitario del Hospital Sant Joan se trasladó en el centro de la calle Gaudí. De esta manera, al CMQ quedan los servicios de sociosanitario y los médicos de familia de las mutuas, con el objetivo de proteger a las personas mayores, que es la más vulnerable delante del virus.

Por otra parte, una brigada del ejército español desinfectó ayer la Residencia Vila-seca, afectada por un brote de coronavirus. El centro acumula 61 residentes contagiados y varias víctimas de entre 76 y 98 años. Según Salut, oficialmente sólo se ha confirmado una víctima mortal con el test PCR, pero fuentes próximas al centro explican que los últimos doce días han muerto seis residentes más con neumonía y sospecha de coronavirus.

El viernes pasado un equipo contratado por la Delegación del Gobierno en Tarragona ya desinfectó varias habitaciones y zonas comunitarias, y el Ayuntamiento de Vila-seca desinfecta diariamente el entorno del equipamiento. Ayer, los efectivos del ejército hizo una desinfección total. En concreto, la actuación fue a cargo de un equipo del ejército del suelo con suya Barcelona y que está formado por personal de las unidades de Barcelona y Girona. Anteriormente ha hecho manchas de descontaminación a la residencia Mar i Sol de Creixell y Sant Antoni Abad del Arboç, entre otros.

La Residencia Vila-seca para personas mayores es gestionada por el grupo MUTUAM y ocupado por un centenar de residentes con plazas públicas que dependen de la Generalitat de Catalunya. El viernes el consistorio ofreció la posibilidad de trasladar a los residentes que decida la dirección en un hotel.

Otro centro que se ha visto gravemente afectado por el coronavirus es la Residencia Ballús de Valls. Al cierre de esta edición, el balance es de 34 residentes contagiados y 15 muertes a causa del virus. El centro es privado, pero a causa de la afectación de la pandemia es gestionado actualmente por el Ayuntamiento de Valls con los departamentos de Salut y de AssumptesSocials de la Generalitat. Según explica Dolors Farré, la alcaldesa de la población del Alt Camp, la mayoría de sanitarios que trabajaban en el centro se vieron afectados por el coronavirus y tuvieron que contratar una plantilla totalmente nueva, entre 24 y 26 trabajadores, que celebra que «está estabilizada». Este personal, explica Farré, se encuentra alojado a Fèlix Hotel, «que estaba cerrado y lo han reabierto para nosotros», y diariamente se hace un traslado en autobús del hotel a la residencia «a efecto que no estén en contacto con nadie», asegura la alcaldesa.

Farré explica también que el entorno de la residencia se desinfecta tres veces al día, mientras que el interior se descontamina «cada vez que es conveniente». La empresa de limpieza municipal CESPA es la encargada.

Otra de las residencias de la demarcación que se ha visto afectada por el coronavirus ha sido la Nostrallar dels Pallaresos, donde han muerto 3 residentes y se han contagiado 30, en más de varios trabajadores que han tenido que pedir la baja. El centro emitió un comunicado ayer en qué advertía que estaban circulando noticias falsas e inexactas y aseguraba que en ningún momento se había impedido la entrada de la Unidad Militar de Emergencias (UME), tal como había apuntado al Partit Popular de Pallaresos y algunos familiares de los residentes en las redes sociales. De hecho, el comunicado explicaba que el pasado lunes los efectivos militares habían entrado a desinfectar los jardines del centro, así como las zonas comunes y que, además, la empresa SEDESA SL ya había descontaminado las instalaciones varias veces, la última el mismo lunes por la noche.

Con respecto a los problemas de personal, la dirección aseguraba en este comunicado que se está solucionando, con la contratación de nuevos profesionales que se irán incorporando progresivamente. El centro asegura en el mensaje que «entendemos la preocupación de las familias de los residentes y pedimos disculpas por si ha fallado la comunicación, pero en todo caso, nunca se ha escondido nada».

Finalmente, la dirección agradece tanto el apoyo de las autoridades locales de los Pallareos así como «la tarea de las trabajadoras y los trabajadores de la residencia que se están dejando la piel por los residentes».

Diferencia entre datos

Durante la rueda de prensa de ayer del Govern, el conseller de Treball, Afers Socials i Família, Chakir el Homrani, fue preguntado por la diferencia entre los datos aportados por algunos centros residenciales con respecto a las que ofrece su departamento.

Concretamente, la Generalitat de Catalunya informó anteayer de que en las residencias de la demarcación de Tarragona había 50 residentes contagiados por coronavirus, cuando sólo en la Residencia Vila-seca había 62, a la Ballús de Valls 34 y a la Nostrallar dels Pallaresos 30. El Homrani defendió que no todos los centros informan de las cifras y que un 20% de todas las de Cataluña no actualizaba los datos de contagiados y muertes, recordando que a partir de mañana, día 8 de abril, será obligatorio hacerlo en todo el Estado español. «Necesitamos esta información por parte de las residencias para poder actuar con antelación», finalizó el conseller.

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