Reus Transport completará la renovación de la flota de buses en junio

Los tres autobuses que restan para completar la renovación íntegra de la flota de Reus Transport se incorporarán a la empresa municipal en sólo tres meses, en junio. Fuentes municipales consultadas detallan aDiariMés que el proceso se está ajustando a los plazos previstos y que estos vehículos «serán idénticos» en los otros diez que ya empezaron a funcionar justohace un año, en marzo de2019. Una vez entren en circulación, la flota dispondrá de un total de 13 autocares recurriendo diariamente las diferentes líneas. De los que ofrecían servicio hasta ahora, los tres que se encuentren en mejor estado quedarán en la reserva para facilitar la respuesta en averías, trabajos de mantenimiento o cuestiones sobrevenidas.

Los anterios vehículos tienen 12 años de antigüedad con cerca de 65.000 kilómetros por año. El coste total de los 13 autobuses para una década será de 6,98 millones de euros. Todos ellos son de nueva construcción y de la marca Mercedes Benz, y el contrato de suministro se adjudicó a su momento en la empresa Evobús Ibérica SA.

Los 13 vehículos mantienen las dimensiones de los anteriores pero ganan 16 plazas más y tienen hasta 104 –24 sentadas y 80 de pie. También disponen de un nuevo vestíbulo para colocar cochecitos y sillas de ruedas. En el apartado tecnológico, llevan ocho cargadores dobles USB para enchufar dispositivos móviles que se pueden utilizar durante el trayecto. Entre las prestaciones de los autocares, destaca la implantación de un alcoholímetro en la cabina del chófer que se puede activar por inmovilizar el bus: el conductor tiene que soplar antes de arrancar y, en caso de que el aparato dé un resultado positivo, el sistema bloquea el arranque. Los autocares tienen doble rampa, cámaras para facilitar la conducción y para aumentar la seguridad de los pasajeros con un monitor de visualización de las imágenes en la cabina –y permiten grabar–, reducen entre un 71 y un 91% la emisión de contaminantes, tienen un chasis más resistente y también mamparas contra vandalismo, y la energía generada por la inercia y el frenazo alimenta equipos como el alumbrado, la información electrónica o la ventilación.

Marcos Massó, presidente de la Federació d’Associacions de Veïns de Reus (FAVR), valora positivamente la renovación de la flota que asiduamente utilizan habitantes de los barrios de la ciudad pero sostiene que «sería muy conveniente que hubiera más frecuencias y que el autobús municipal llegara a todos los puntos de la ciudad». «Se han hecho algunas variaciones a las líneas a petición de las asociaciones de vecinos y se han cambiado incluso paradas de autobús de sitio», añade, aunque «hay cuestiones aunque se podrían mejorar». Una de ellas hace referencia al despliegue del servicio a la urbanización Aigüesverds, donde no hay transporte público ahora. Massó, que también es presidente de la zona, expresa que «no entendemos cómo es que nos dicen que no si somos un barrio igual que El Pinar, que el barrio Montserrat, que cualquiera. Y los vecinos pagamos nuestros impuestos igual que todos». «Se trataría de que pasara un par de veces al día, pero nos dicen que no es rentable», añade.

Atender el criterio de los vecinos

Además de eso, «desde Pelai ySol i Vista se está tratando de hacer un ajuste de horarios y paradas para las escuelas, Sol i Vista también ha pedido una parada para poder ir al CAP Sant Pere y se ha solicitado otra en el barrio Juroca». A principios de año, Reus Transport recuperó la marquesina de la L60 a Maria Aurèlia Capmany a petición de los vecinos de Mas Iglesias. Massó destaca que, de cualquier forma, «siempre nos reciben y estudian las propuestas, y dan una respuesta» y que, «en general, el autobús funciona bien». La FAVR ha pedido reiteradamente que se tenga en cuenta la opinión de los vecinos antes de hacer cambios a las líneas. Con respecto a las innovaciones tecnológicas de los nuevos vehículos, Massó valora que «están bien pero la mayoría de usuarios son personas mayores que lo que quieren es tener la parada cerca», a pesar de que «los buses estaban viejos y había que renovarlos».