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Vivienda

La PAH pide «soluciones reales» para las familias del bloque Sant Magí de Reus

El edificio tuvo que ser desalojado a finales de año por un derrumbe parcial pero todavía residen allí varias personas

La fachada del bloque de la calle Sant Magí que actualmente está ocupado por personas sin hogar.

La PAH pide «soluciones reales» para las familias del bloque Sant Magí de ReusOlívia Molet

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El edificio ubicado en el número 35 de la calle Sant Magí tuvo que ser desalojado en septiembre del año pasado por un derrumbe parcial mientras el interior estaba ocupado. Actualmente, todavía hay varias familias viviendo en este bloque y, una de ellas, asiste a cada reunión de la Plataforma Afectados por la Hipoteca (PAH) para intentar encontrar una solución. Necesitamos que el Ayuntamiento aporte «soluciones reales» y no parches.

«Nuestra compañera, Choub, está usurpando una vivienda, eso es cierto, pero lo hace porque no tiene ninguna alternativa habitacional por parte del administació», denuncia Sandra Casanova, miembro de la PAH. Precisamente, ayer por la mañana, Choub tenía un juicio y recibió el apoyo de las compañeras de esta plataforma, un juicio que finalmente se acabó anulando, hecho que celebraron desde la entidad.

«Tenemos muchas compañeras que son recuperadoras de viviendas y lo hacen porque no se está aplicando la ley 24/2015 en el Ayuntamiento».

Esta normativa se creó ante la crisis económica que afectó a tantas personas y provocó que muchas se quedaran sin vivienda y, lo que regula esta ley es que «todo el mundo tenga acceso a los suministros básicos de agua potable, de gas y de electricidad a las personas y unidades familiares en situación de riesgo de exclusión residencial», según detalla el artículo 5 de la ley 24/2015.

Un bloque en mal estado

El edificio de Sant Magí tuvo que ser desalojado a finales del año pasado por un derrumbe en una parte del bloque. Desde la PAH aseguran que «todavía hay muchas personas viviendo allí». De hecho, detallan que «sólo dos familias que tenían menores fueron desalojadas y colocadas en otro edificio cuando tocaba» y añaden que «el Ayuntamiento dice que está apto para residir en él pero eso es mentira. Nosotros hemos estado dentro del edificio y es un peligro». La misma plataforma concreta que «las condiciones son pésimas, hay grietas donde te cabe el puño de la mano perfectamente, las escaleras están que se caen, todo está a punto de hundirse» y añaden que «cuando es más peligroso es en los días de lluvia porque las grietas se hacen mayores, como pasó el año pasado».

«Ahora que vuelve el mismo gobierno, seguiremos insistiendo y haciendo acciones hasta que nos escuchen, porque las leyes están para aplicarlas», denuncia Casanova. Desde la PAH exigirán al nuevo equipo de gobierno que encuentren una solución para las familias que están recuperando las viviendas sin embargo «no parches, sino soluciones reales».

Primera reunión a tres bandas

El pasado mes de mayo el Ayuntamiento, la PAH y un banco se reunieron por primera vez para analizar una situación de alquiler social, una reunión que desde la plataforma les gustaría seguir manteniendo para ir encontrando soluciones para todas las personas que sufren esta falta de vivienda y que por eso las tienen que ocupar. «Es una vergüenza que tengamos que pagar 1.000 euros por un piso que realmente cuesta 500», critica Sandra Casanova.

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