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La plaza de la Estació de Reus se convierte en zona smart

El Ayuntamiento la ha dotado de una estación de recarga para vehículos eléctricos, de un banco inteligente y de wifi gratuito

El banco inteligente

La plaza de la Estació de Reus se convierte en zona smartAjuntament de Reus

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La plaza de la Estació se ha convertido en una zona smart, con la puesta en funcionamiento de diferentes servicios adelantados: una nueva estación de recarga para vehículos eléctricos, integrada en la red que gestiona Reus Mobilitat i Serveis; cobertura de la red municipal Reus WiFi; y un banco inteligente para la recarga de dispositivos móviles, alimentado con módulos fotovoltàics.

El Ayuntamiento de Reus, dentro de la estrategia Reus Smart City, ha instalado un cargador de vehículos eléctricos que tiene capacidad para dar servicio a dos coches. Es de recarga semi-rápida, con lo cual un vehículo convencional se puede cargar completamente con un tiempo de entre 2 y 4 horas. La instalación completa el plan de despliegue de cargadores municipales previstos para este año. La red que gestiona la empresa municipal Reus Mobilitat i Serveis dispone actualmente de 14 estaciones de recarga, con capacidad para dar servicio a 32 vehículos de manera simultánea.

La plaza de la Estació también dispone de cobertura de Reus WiFi, de la red abierta de Reus Smart City. El alcance del servicio también llega al paseo de Sunyer y a la plaza de las Oques. Con esta nueva implantación, el proyecto Reus WiFi ha pasado de 16 a 18 espacios cubiertos, y tiene la voluntad de ir ampliando las zonas WiFi públicas en diferentes espacios de la ciudad de manera progresiva. El uso de la red pública ha ido creciendo, y actualmente, más de 500 usuarios se conectan diariamente a la red.

La tercera actuación incluida en la zona Smart de la plaza de la Estació es la instalación de un banco inteligente, que sustituye el banco tradicional que había hasta ahora. El nuevo asiento público, de diseño moderno, permite la recarga de aparatos móviles con conexión USB o con tecnología sin hilos. El cargador funciona de manera autónoma, gracias a la batería y módulos fotovoltaicos de que dispone. Esta actuación ha tenido un coste de 6.500 euros.

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