Diari Més

El apoyo a Pellicer frustra toda opción de una moción de censura por seis meses

ERC y Ara Reus mantienen el «sí» a la cuestión de confianza y la ley no los permitiría intentar la sustitución del alcalde en medio año

L'alcalde Carles Pellicer amb Noemí Llauradó (ERC) i Jordi Cervera (Ara Reus) durant un ple.

El apoyo a Pellicer frustra toda opción de una moción de censura por seis mesesOlívia Molet

Publicado por

Creado:

Actualizado:

El «sí» rotundo de ERC y Ara Reus a la cuestión de confianza presentada por el alcalde y que centra el pleno extraordinario convocado para mañana imposibilitará, cuando haya acabado de consumarse, toda opción de una moción de censura, salga o no airoso Carles Pellicer de la votación vinculada al presupuesto municipal para el 2017. Al menos durante un plazo de medio año, en octubre. Y es que la Ley Orgánica del Régimen Electoral General (LOREG), en su artículo 197bis, prevé que «concejales que votaran a favor de un asunto vinculado a una cuestión de confianza no podrán firmar una moción de censura contra el alcalde que lo hubiera planteado hasta que no trascorri un plazo de seis meses».

Fuentes de la CUP, promotora de la iniciativa para hacer caer Pellicer del cargo y que busca la complicidad de los socios de gobierno en este objetivo, precisaban ayer que «intentaremos que -ERC y Ara Reus- voten que no para darnos margen y abrir líneas de negociación de nuevo gobierno, sin condiciones y con la única voluntad de alterar el inmovilismo que ahora está generando Convergencia». Sin embargo, «si no lo conseguimos, el siguiente paso que nos plantearíamos es trabajar de cara a que, dentro de seis meses, ya se pudiera hacer esta moción de censura. Si no lo hacemos ahora, lo volveremos a intentar igualmente». La formación estaba pendiente de la celebración, ayer por la noche, de una asamblea para concretar el aval en los diferentes escenarios.

Una situación inviable

Para prosperar y consumar así el relevo de Pellicer en la alcaldía de Reus, una hipotética moción de censura que sucediera el también hipotético «no» a los presupuestos, en los términos en que la planteaba la CUP el viernes pasado, necesita la mayoría absoluta de votos. Es decir, el posicionamiento a favor de 14 de los 27 concejales que integran el consistorio. La CUP en suma 6, hecho por el cual tendría que recurrir, tal como ya anunció, a la complicidad de PSC (4), ERC (2) y Ahora Reus (2). Los concejales de estas dos últimas formaciones, parte ahora del gobierno que encabeza el PDeCAT, quedarían inhabilidades para la moción de censura si, tal como han confirmado, dan apoyo a Pellicer en la cuestión de confianza. La puerta de la CUP está cerrada a Ciutadans y PPC.

El margen para encontrar a un nuevo cabeza de lista con el consenso de los 14 concejales sería de 30 días a partir de un resultado negativo en la cuestión de confianza. Pero, en la tesitura que plantea la CUP, el acuerdo no sería viable y Pellicer seguiría siendo alcalde, ya con el presupuesto 2017 aprobado, tal como todo apunta. La previsión es que representantes de ERC y Ara Reus comparezcan para afianzar su compromiso.

Contactos para la abstención

Con respecto al pleno extraordinario donde mañana miércoles se votará de nuevo el proyecto de cuentas –con el mismo expediente–, ligado ahora a la cuestión de confianza, el alcalde ha mantenido en las últimas horas reuniones con algunos grupos municipales para convertir la postura del «no» en la de la abstención y asegurarse luz verde sin tener que atravesar el plazo de 30 días. Pellicer necesita sólo con que haya más votos favorables que en negativo, la mayoría simple para que saque adelante la cuestión de confianza.

En este punto, el portavoz de Ciutadans, Juan Carlos Sánchez apuntaba ayer que «será complicado que cambiemos de opinión. Si el mismo viernes decíamos que no los aprobábamos porque no había bastante liderazgo. El alcalde quiere volver a endeudarse seis millones después de haber amortizado doce y, en eso, nunca estaremos de acuerdo». Aunque ambas partes se han emplazado a un segundo encuentro hoy, «en principio votaremos que no y es muy complicado que cambiemos», asegura Sánchez.

Por su parte, desde el PPC, Sebastià Domènech se expresaba en una línea similar y decía ayer que «eso es una maniobra del alcalde para esconder su soledad y la incapacidad para aprobar unos presupuestos. Es una huida adelante por la incompetencia. Sabe que, de una manera u otra, dentro de un mes se aplicará el presupuesto que ya se ha rechazado una vez y que creo que volverá a rechazarse el miércoles». «El expediente es lo mismo y nuestro voto también lo será», concluía el popular.

El tema «rebasa Reus»

Quien no ha definido todavía su voto, al menos de manera pública, es el PSC. El primer secretario Andreu Martín lamentaba ayer que «con esta herramienta –la cuestión de confianza– se ha situado en la ciudad en una inestabilidad política que nos preocupa y en que se tiene que dar respuesta en este pleno. Todo coincide con la oferta de la CUP de liderar una alternativa de gobierno. Y lo tenemos que valorar». Martín añadía que «no tenemos una posición concreta en este momento. Es difícil. Estamos hablando con todo el mundo, incluso con el primer secretario de la Federación porque es una situación que rebasa Reus», añadía, y recordaba que «nosotros dimos una opción, no fue uno no sin salida» y que «el retorno ha sido este sistema para aprobar el presupuesto y gestionarlo en minoría».

tracking