Renfe ha abierto un expediente informativo contra un trabajador de seguridad que ha agredido a una persona a la estación de Sants mientras estaba siendo reducida, según ha adelantado betevé y han confirmado a la ACN fuentes de la compañía. Según explica la cadena, todo ha empezado cuando esta persona ha increpado un cámara pidiéndole que no la grabara. Al verlo, se han acercado agentes de seguridad privada, de la empresa Sureste, para hablar. Uno de los agentes ha acabado reduciendo a esta persona a tierra y entre cuatro guardias más lo han esposado. Mientras eso pasaba, el agente en cuestión le ha pegado con la mano reiteradamente y le ha dado una patada. El agente ha sido expulsado del servicio poco después de los hechos.
Fuentes de Renfe aseguran que ellos mismos han requerido la retirada inmediata del servicio del trabajador. Las mismas fuentes han querido dejar claro que no tolerarán actitudes de este tipo.