Después de ver la primera temporada de 'The Sopranos' hemos hecho una breve crítica para convencerte y engancharte a la madre de todas las series
Durante estas semanas seguramente has oído hablar mucho de
The Sopranos, una serie estrenada el año 1999 por HBO y que para muchos es la mejor serie de la historia. Has oído a hablar mucho de ella porque el pasado 10 de enero hizo 20 años que Tony Soprano aparecía en la consulta de la doctora Melfi por primera vez, y porque su precuela
The Many Saints of Newark empieza a coger forma. Nosotros hacía tiempo que escuchábamos y leíamos cosas (todas buenas) sobre
The Sopranos y no habíamos encontrado el momento idóneo para empezarla. Una serie ya finalizada de 6 temporadas, divididas en 86 capítulos, la tienes que coger con ganas. Finalmente nos hemos dejado llevar por la corriente y después de ver la primera temporada de la serie, tenemos algo interesante que decir.
La serie fue creada el año 1999 por David Chase y ganó numerosos premios, entre ellos 21 Emmy Awards y 5 Golden Globes. Durante aquella época destacó, sobre todo, por ofrecer una ficción de alta calidad a una producción destinada a la televisión. Fue especialmente reconocida por la magnífica interpretación de los actores principales, por la evolución de los personajes y por su guion. Muchos consideran que su popularidad consiguió abrir las puertas del éxito a otras series de ficción.
Una de las primeras cosas que nos llamó la atención es la cabecera con la canción
Woke Up This Morning del grupo Alabama 3, toda una declaración de intenciones. Un tema que encaja a la perfección con la imagen de Tony Soprano (James Gandolfini), conduciendo y fumándose un puro con el brazo en la ventanilla. Un mafioso con clase.
La historia empieza con Tony Soprano en la consulta de la psiquiatra Jennifer Melfi (Lorraine Bracco), una situación interesante por el hecho de que el señor Soprano es uno de los capos de la mafia italoamericana de New Jersey, patriarca de la familia Soprano, quien tiene que omitir a la doctora Melfi su situación 'profesional' a fin de que ella mantenga el secreto profesional. Tony ha sufrido varios ataques de ansiedad y decide visitarla para poner remedio. Definitivamente, en pocos capítulos podrás ver cómo la relación entre estos dos personajes se convierte en una mezcla entre humor y algo perturbador.
A partir de aquí la serie narra los asuntos de la mafia y sobre todo de la familia, introduciendo personajes que forman parte del entramado que dirigen los Soprano. Unos personajes que crean expectación por sí mismos, no hace falta que se presente un problema para engancharte al siguiente episodio, lo quieres ver porque tienes ganas de ver el absurdo de los personajes como Paulie Gualtieri (Tony Sirico), Silvio Dante (Steven Van Zandt) o Christopher Moltisanti (Michael Imperioli), o como evoluciona el catolicismo irracional de la mujer de Tony Soprano, Carmela Soprano (Edie Falco).
Y finalmente los patos. No sabemos cómo acaba la serie, y seguramente los que lo hayan visto ahora reirán, pero los patos de Tony Soprano desaparecieron y David Chase convirtió este abandono en una gran tragedia. No sabemos si volverán, hemos evitado toda clase de
spoilers con el fin de disfrutar de la serie, pero de momento sabemos que todo empezó cuando los patos abandonaron a Tony Soprano.