La efectividad y saber sufrir dan la victoria en el Nàstic (1-2)

El Nàstic de Tarragona se llevó los tres puntos de Alicante después de vencer en el Intercity en un partido donde la efectividad en las áreas fue decisiva. Los grana no dominaron el partido en términos de posesión, pero a la primera mitad se mostraron muy acertados conseguido dos goles en menos de diez minutos. A la segunda mitad, los de Iñaki Alonso tuvieron que ganar el partido desde la defensa, aguantando las acometidas del Intercity y sabiendo sufrir para sellar una victoria muy necesaria por volver a la lucha por el play-off de ascenso.

Iñaki Alonso repitió el suyo once que mostró contra el SD Logroñés con un único cambio. Nil Jiménez fue el lateral titular y Joan Oriol, el capitán grana, se tuvo que quedar en el banquillo por molestias físicas. Este cambio sutil acabó por influir las ocasiones del Nàstic durante el partido.

En los primeros minutos de partido, el Intercity se hizo fuerte en su estadio. El equipo entrenado por Gustavo Siviero tomó la posesión del duelo y se acercaba sin peligro a la portería de Manu Garcia. El estropeado césped de Antonio Solana no favorecía el juego más veloz y el Nàstic luchaba por intentar controlar un partido que, poco a poco, se iba volviendo negro y dorado. Los alicantinos tenían el dominio y el peligro, pero los primeros a golpear fueron los de Iñaki Alonso.

Los contraataques grana iban por la banda izquierda. Nil Jiménez se mostró más que motivado en su retorno a un once inicial y dominó su carril. El lateral barcelonés centró en el área y Guillermo se adelantó a los defensas por amntenir viva la jugada. El delantero centró en el área pequeña y obligó a la defensa del Intercity a rehusar la pelota. El esférico salió bombardeado a la frontal del área y Eric Montes Arce lo vio caer. El de Manresa no se lo pensó y no va dado tiempo en la pelota a botar. Soltó la pelota en el aire y el remado salió propulsado como un obús hacia la portería rival. Manu Herrera no pudo hacer nada para evitar que el Nàstic se adelantara con todo un golazo de Montes Arce.

El gol encendió la mecha del Nàstic y los grana empezaron a mover la pelota con criterio. El Intercity se vio tocado después de dominar y recibir un gol, y los de Alonso lo aprovecharon.

Cien por cien de efectividad

Pocos minutos después, el Nàstic marcó el segundo. De nuevo llegó por la izquierda. Dos toques gráciles entre Nil Jiménez y Aarón Rey fueron suficientes para que el lateral grana le ganara la partida a su marca. El barcelonés agotó la banda y centró en el segundo palo. Allí estaba Marc Fernández en plena lucha con Álvaro Pérez. La pelota iba cayendo y el delantero grana no estaba en condiciones para rematarla con la cabeza, así que, pillo, alargó la pierna y cuando cayó el esférico lo envió hacia el fondo de la portería rival sorprendente tanto al central como el portero del Intercity.

El Nàstic no estaba dominando, pero tenía el punto de mira bien calibrado, porque en dos ocasiones claras marcó dos goles. Este dominio en el marcador no afectó al guion del partido. El conjunto de Alicante seguía marcando el tiempo y encaraban la portería de Manu García. En una de estas ocasiones, el Intercity consiguió hacer daño al Nàstic. Belloti fue ahora quien ganó la partida a Pol Domingo y centró el esférico en el área pequeña. Allí estaban Josema y Nil Jiménez, pero Etxaniz fue más rápido y ganó la espalda a los dos defensores que se quedaron como dos estatuas y no hicieron nada para evitar que el delantero del Intercity anotara el 1-2. Manu García la tocó con el pie, pero no fue suficiente para tapar el error en defensa del equipo.

A pesar del gol, el Nàstic era consciente de que todavía mantenía ventaja en el marcador, sí que trató de bloquear el juego del conjunto local en el centro del campo. El partido llegó al descanso sin muchos sustos más, el Nàstic evitó ninguna nueva acción de peligro y se hicieron fuertes con la gran efectividad que mostraron ante la posesión dominada por el Intercity.

Manu García vuelve a ser salvador

El inicio de la segunda mitad no provocó un cambio en el guion del partido. El Intercity seguía dominando y no tardó mucho en obligar a trabajar a Manu García. Vadik remató a solas en el área una jugada en pelota parada, pero el portero grana estaba preparado para ganar el duelo uno contra uno. Poco después, Soldevila fue el autor de la siguiente ocasión clara con un remate eal segundo palo que salió fuera milagrosamente.

Tocaba sufrir. El Nàstic ya había estado en estas condiciones en el pasado. Entonces se decía que el equipo ganaba desde la defensa y, de esta manera, todas las piezas volvieron a encajar para mantener un bloque defensivo sólido. Alonso movió el banquillo para añadir velocidad por las bandas con Robert Simón y Marc Montalvo para seguir bregando en medio del campo. El Nàstic quería matar el partido en un contraataque, pero la única ocasión de la segunda mitad fue un chute dividido de Marc Fernández que salió desviado por un defensor. Este era el gol que necesitaba el Nàstic para acabar de matar el partido, pero no fue posible, así que el conjunto de Iñaki Alonso tuvo que sufrir de lo lindo para cerrar el partido.

El Intercity bombardeaba la portería del Nàstic de todas las maneras posibles: centradas desde el lateral, chutes dentro del área y jugadas de estrategia, pero el conjunto de Iñaki Alonso mantuvo el tipo en bloque defensivo y Manu García volvió a su mejor versión que tanto se echó de menos en los últimos duelos.

Después del 0-2 a la primera mitad, era impensable que el Nàstic tenía que sufrir tanto, pero así fue hasta el último minuto de partido. Nsue acabó por dar el último susto en el minuto 93. El defensor del Intercity remató completamente solo una jugada en pelota parada, pero la pelota se volvió a marchar fuera.

Con una gran efectividad a la primera mitad y una defensa sólida en la segunda, el Nàstic de Tarragona se marchó del estadio Antonio Solana con los tres puntos en el bolsillo. Iñaki Alonso consiguió la primera victoria en el banquillo grana y coloca en el equipo a tres puntos de distancia del play-off de ascenso.