Diari Més

Un día como hoy hace diez años

El Nàstic hace justo una década que subió a Primera División, una fecha histórica que queda en la memoria de todos los nastiquers

Los jugadores del Nàstic, en Chapín, celebrando un ascenso inesperado y más que merecido, justo ahora hace diez años.

Un día como hoy hace diez añosDomingo Garcia

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Era el 3 de junio del 2006. 40ª jornada del campeonatode ligade Segunda División A. El Nàstic viajaba en Jerez sabedor que si ganaba o, como mínimo, puntuaba, tenía mucha parte del camino del ascenso a Primera División hecha. Entonces, a la categoría de plata, también con 22 equipos participantes, los tres primeros clasificados subían de forma directa. Un traspié del Lorca, cuarto antes de empezar la jornada, ponía en bandeja de plata el ascenso a los tarraconenses y, dicho y hecho. El Lorca cayó derrotado (0-1) contra una Lleidaque se jugaba la vida, hecho que motivó que el empate sin goles del Nàstic en Jerezresultara suficiente para provocar la locura con un hito histórico.

Hoy, pues, hace diez años de la última hazaña del Nàstic, la de un ascenso que se puede repetir diez años y un día después si mañana el equipo de Vicente Moreno es capaz de vencer al Alavés y que el Leganés no pueda sumar el triunfo al campo del Mirandés. Mañana, Moreno quiere tomar el relevo de un Luis César que fue capaz de elevar el Nàstic al cielo y que consiguió que la ciudad se uniera completamente dejando atrás cualquier diferencia o pensamiento para ir a todo el mundo en una.

La alineación de aquel históricoJerez-Nàstic la formaron Rubén Pérez, Ruz, David García, Cauce, Lupidio, Carlos Merino, Abel Buades, David Cuéllar, Diego Torres, Antoni Pinilla y Bolo. De ellos, los únicos que continúan en activo es David Cuellar, jugador del Vilaseca de Primera Catalana; y Rubén Pérez, que ha bajado esta temporada a Tercera Catalana con el CDC Torreforta. El resto, han tomado caminos diversos. Algunos de ellos han seguido vinculados al mundo del fútbol, mientras que otros han tomado la decisión de coger otro camino. Todos ellos, sin embargo, quedarán en la memoria de los millares y miles de tarraconenses en que, dos días después del ascenso, el lunes 5 de junio, salieron a la calle para salir con los suyos.

Un futbolista qué no aparecía en esta alineación, pero que también formaba parte de la plantilla y que fue vital para el ascenso a la categoría de oro es un hombre que todo el mundo conoce. Un jugador que llevael «6» a la espalda y que también fue partícipe del ascenso de la pasada temporada a Segunda División. Un jugador que se ha ganado el corazónde la afición grana y que ya dijo, en pequeño comité, al acabar la temporada pasada, que el Nàstic no tardaría más de un año en volver a celebrar un ascenso. Se trata de Manolo Martínez, un futbolista eterno que, además, es uno de los máximos líderes en el vestuario y un jugador que asegura que lo mejor todavía está para llegar a Tarragona.

Andreu i Maragall

«Estoy muy feliz. Hemos sufrido mucho a lo largo de la temporada y nos lo merecíamos. Estoy especialmente contento por la gente, que siempre ha estado en nuestro lado. Nuestra afición es de Champions». Así se manifestaba el presidente del Gimnàstic, Josep Maria Andreu, instantes después de saber que eran equipo de Primera División. Las reacciones no se hicieron esperar, ya que Pasqual Maragall, entonces presidente de la Generalitat de Catalunya, remachó a Andreu: «Muchas felicidades, presidente». Joan Miquel Nadal, alcalde de Tarragona poraquel tiempo, añadía que «quiero destacar que el equipo supo jugar, el entrenador supo hacer las cosas y el presidente Andreu lo ha hecho muy bien».

El Ayuntamiento detalló que fueron más de 12.000 personas las que se reunieron en la plaza de la Fuente para celebrar el ascenso. Una pantalla gigante de 35 metros cuadrados sirvió para que todos, unidos, pudieran vivir en directo un hito tan señalado. Traques, cava y cánticos no faltaron en un día que todo el mundo tiene grabado en su cerebro.

Todo el mundo se emplazó al lunes, cuando los futbolistas se convirtieron en los auténticos protagonistas. «Visca el Nàstic y viva Tarragona», exclamaba el capitán, Jesús María Serrano, a qué el técnico, Luis César, añadía que «hemos sufrido, pero entre todos lo hemos conseguido». «De segunda quienno bote!», sentenció el central Egoitz Jaio.

tracking