El Ayuntamiento de Roda de Berà celebró el viernes un emotivo acto de instalación de dos adoquines Stolpersteine en recuerdo de los dos rodenses asesinados en un campo de exterminación nazi: Josep Mercadé Arall y Pere Mercader Cañellas. Ambos fueron deportados en el campo de concentración austríaco de Mauthausen y asesinados en Gusen, en noviembre, Pere, y en diciembre, Josep, del mismo año, 1941.
Durante el acto, en la plaza de los Pins, el alcalde, Pere Virgili, pidió a los jóvenes de 4t de ESO del Instituto Roda de Berà presentes que no caigan de nuevo en la trampa, parafraseando a Erich Hartmann: «La guerra es un lugar donde los jóvenes que no se conocen y no se odian se matan entre sí, por la decisión de viejos que se conocen y se odian, pero no se matan...».
Lluch Mercadé, nieto de Josep Mercadé, pronunció unas palabras en recuerdo de su abuelo, y dirigidas a su padre, Joan, quien era un niño de 4 años cuando Josep Mercadé se tuvo que marchar al exilio, y poco después su madre fue encarcelada en la prisión de mujeres de Les Corts.