Según el VIII Informe sobre Cibercriminalidad de la Dirección General de Coordinación y Estudios de la Secretaria de Estado de Seguridad, el 89,6% de los ciberdelitos del Estado fueron estafas informáticas. A mucha distancia hay las amenazas y coacciones a través de Internet (4,9%).
El perfil del ciberdelincuente es el de un hombre (73,3%), de entre 26 y 40 años y de nacionalidad española, presuntamente implicado en la comisión de fraudes informáticos, amenazas y coacciones y delitos sexuales.
Las comunidades que concentran más infracciones penales son Cataluña, Madrid, Andalucía y la Comunitat Valenciana.
Por otra parte, se reportaron 861 incidentes de ciberseguridad en infraestructuras críticas al conjunto del Estado. Eso supone un 5,2% más que el año anterior. Por ámbitos, destacan los incidentes que afectaron a los sectores tributario y financiero (52,5%), seguido del transporte (24,08%) y la energía (14,05%).