El sector turístico de Tarragona roza los 10 millones de pernoctaciones pero sigue lejos de una temporada «normal»
El turismo de proximidad ha permitido «aguantar» una campaña con pocos visitantes extranjeros, según los empresarios
El turismo internacional recupera bastante y dice sentirse seguro en Tarragona
La pandemia, más allá de cambiar el perfil del visitante a la demarcación, también ha modificado la tendencia de planificación de las vacaciones. Según Cabré, los visitantes han esperado a «ultimíssima hora» para reservar las estancias y siempre han sido acondicionadas al contexto sanitario. En este sentido, ha reconocido que las cancelaciones que se han registrado este año han tenido que ver con la notificación de nuevas restricciones o bien el incremento de casos de covid-19 relacionados con la quinta ola de la pandemia. Por su parte, las empresas turísticas han tenido que adaptar tanto los precios de los alojamientos como las políticas de cancelaciones para seguir siendo un destino atractivo para los turistas, tanto nacionales como internacionales.
Prórroga de los ERTE y moratoria de la tasa turística
Según los empresarios, la falta de vuelos chárter ha tenido una gran incidencia en la ocupación en la Costa Daurada. En un año «normal», la mitad de los turistas son extranjeros, un sector que no se ha recuperado como estaba previsto este 2021. Mercados como el ruso o el inglés han sufrido una bajada superior al 90% en las pernoctaciones al conjunto de Tarragona. El turismo nacional ha representado el 77,7% de las reservas que se han hecho este año, una situación que ha permitido que el sector haya iniciado una «lenta recuperación». Para Cabré sin embargo, los meses de otoño e invierno serán «complicados» después del «espejismo» que se ha vivido en agosto y por este motivo ha reiterado la demanda de prorrogar los ERTE y la moratoria de la tasa turística para garantizar la continuidad del conjunto del sector.
De momento, la FEHT todavía no ha contabilizado el número de negocios que han sufrido las consecuencias más duras de la pandemia y que han tenido que cerrar de forma permanente, pero ha asegurado que este verano el 25% de los hoteles de la demarcación no han abierto, acumulando más de un año y medio de inactividad.