Aunque la nevada no ha afectado a la cosecha de este año -que prácticamente ya estaba recogida por todas partes, excepto algunas poblaciones de la Ribera d'Ebre-, los técnicos de la DOP Siurana apuntan que los efectos del temporal se reflejarán, sobre todo, en las cosechas de los olivos más jóvenes. Se calcula que, en un periodo de entre dos y cinco años, producirán menos o bien no darán frutos.
Ante esta situación, el presidente del Consejo Regulador de la DOP Siurana, Antoni Galceran, ha apuntado que comprar el aceite del territorio afectado es la mejor forma de ayudar al sector. «No nos podemos permitir el lujo de perder campesinos, ni tampoco el cultivo de los olivos», ha señalado el responsable del ente.