El agente ha explicado que a la una de la madrugada del 18 de agosto estaba delante la entrada del Club Nàutic del paseo marítimo de Cambrils, delante hay un espacio donde se celebraba una fiesta y que el vehículo policial permitía el paso tanto por la acera como por la vía. «Veo que viene un vehículo a gran velocidad, encara la rotonda que teníamos justo delante, veo que va contra nosotros, me lanzo al suelo a la izquierda y me doy cuenta de que la compañera había sido atropellada», ha explicado.
Después vio cómo el coche que los había embestido volcaba detrás de ellos. Del vehículo empezaron a salir personas con chalecos con cinta americana que parecían chalecos bomba. «Sólo girarme veo que uno viene corriendo hacia mí con una hacha en la mano, gritando '
Allah Akbar ', y no me dio más tiempo a prepararme y cuando lo tenía a pocos metros disparar para abatirlo», ha relatado.
«Cuando la persona se cae, vienen tres personas más corriendo hacia mi posición para atacarme. En aquel momento yo me desplazo corriendo a la derecha porque no tenía munición en el subfusil. Consigo ponérmelo en el cuello. Cojo mi arma reglamentaria, ya los tenía encima, gritando '
Allah Akbar' y viniendo hacia mí. No sé qué llevaban en las manos», ha explicado. Después los abatió.
En aquel momento acaba «en estado de shock» y con la sensación que todo había ido «muy deprisa». Oyó gritar a algunas personas, una con sangre pidiendo ayuda y varias personas heridas en el suelo donde también había su compañera. Un ciudadano le dejó el teléfono para llamar y pedir ambulancias y refuerzos, ya que no encontraba la emisora.
El agente ha explicado que considera que los terroristas se acercaron hacia aquella zona porque es donde había más afluencia de gente. «Había unas 70 personas bailando disfrutando de la velada, y por eso creo que fueron al sitio, para cometer el máximo daño posible», ha expuesto.
Desde el momento de los ataques el agente ha explicado que le han reconocido un «trastorno por estrés posttraumático grave», que ha sufrido varios episodios de depresión en que necesita aislarse, así como un «estado de alerta» permanente. «Tengo miedo de que se me reconozca y vuelvan a atacarme».
Ha explicado que no ha recibido ninguna indemnización ni por parte del Ministerio del Interior ni de la Generalitat de Catalunya. Tampoco ha sido reconocido como víctima de terrorismo, que ha dicho que está en trámite. No se ha podido reincorporar al trabajo después de tres años.
Definición de héroe. ¿Cuántas vidas habrá salvado este señor?
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