Agentes de los Mossos d'Esquadra de Tarragona detuvieron este pasado viernes a un hombre de 31 años, de nacionalidad española y vecino de Tarragona, como presunto autor de quince hurtos cometidos entre el 8 de enero y el 29 de febrero de este año.
La investigación empezó el 8 de enero cuando se recibieron dos denuncias por hurtos en los vestuarios de un mismo pabellón polideportivo situado en los barrios de Ponent de Tarragona. El ladrón tuvo que huir corriendo cuando se vio sorprendido después de haber accedido a los vestuarios de dónde sustrajo dos teléfonos móviles y dinero en efectivo.
Este tipo de acciones se fueron repitiendo el día 13 y 14 de febrero en dos pabellones municipales y un instituto del Tarragonès. El 16 de febrero hubo un hecho más en unas instalaciones deportivas de Cornellà de Llobregat (Baix Llobregat).
El 17 de febrero el hombre reincidió entrando en uno de los pabellones donde ya había cometido un hurto, momento en que fue reconocido por varios testigos que ya lo habían visto cuando accedió por primera vez cuatro días antes. En todos los casos consiguió llevarse teléfonos móviles o dinero.
El ladrón volvió a actuar el día 21 de febrero en un club de Tarragona, donde se presentaron hasta cuatro denuncias, y el día 29 en un equipamiento deportivo de Lleida.
En más de una ocasión el ladrón se encontró con personal de las instalaciones y también fue registrado por sus sistemas de videovigilancia, lo cual facilitó su posterior detención.
Se calcula que el valor de todo los efectos sustraídos entre teléfonos móviles y dinero en efectivo supera los 4.000€.
El detenido quedó en libertad con cargos después de pasar este domingo a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Tarragona.
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