La Feria de Indianos de Torredembarra agota las plazas de las visitas

«Éxito», así definía al alcalde de Torredembarra, Eduard Rovira, la Feria de Indianos a los cuales se celebró este fin de semana. En total, más de un millar de personas visitaron la exposición De l’aiguardent als licors, en el patio del Castell, mientras que la música amenizó las dos jornadas. «La salsa tuvo fuera de éxito, también la fanfarra, y la visita a las casas de los indianos fue todo un éxito», repetía el alcalde, que recordaba que ayer domingo la feria cerraría con un concierto de habaneras con el grupo Cavall Bernat. Con respecto a las visitas guiadas, Rovira aseguraba que todas las plazas se habían agotado, en total 200 repartidas en cuatro ediciones de 50 personas cada una y que habían permitido al visitante conocer el cementerio y el patrimonio indiano. El alcalde destacó también la cantidad de gente vestida de blanco, tal como se había pedido desde la organización.

El casco antiguo de Torredembarra acogió, por décimo año, la Feria de Indianos. Este espacio, en torno a la calle Ample, la plaza de la Villa y el patio del Castell, entre otros, permitió profundizar en la vida de los antepasados. Como en muchas poblaciones catalanas, varias personas se significaron por haber construido pequeños palacios en los siglos XIX y XX con el oro conseguido después de hacer las Américas.

Precisamente la visita a las casas de los indianos Joan Güell, Mañé y Flaquer, entre otros, permitió ver en directo algunas actuaciones que reproducían la época y la historia de estos personajes dedicados al comercio de esclavos y la industria.