Cae la llegada de menores extranjeros no acompañados en Tarragona

Es una tendencia en toda Cataluña. Durante los últimos meses, el Departament de Treball ha detectado una bajada en la llegada de menores extranjeros no acompañados (MENA). El número de jóvenes que han llegado hasta el 15 de agosto de 2019 está por debajo de las previsiones de la Generalitat que calculaba la llegada de 5.500 jóvenes para este año. Los centros de la Direcció General d’Atenció a la Infància i l’Adolescència (DGAIA) del Camp de Tarragona han acogido hasta el 15 de agosto a 150 chicos, que contrastan con los 512 que acogieron durante el 2018.

Desde Treball, atribuyen esta bajada a un mayor control de la frontera por parte de Marruecos. El número de inmigrantes adultos que viajan solamente desde Marruecos también es menor. Fuentes de Treball explican que la previsible caída en las llegadas –que tendrán que confirmar al finalizar el 2019– «nos ayuda a destinar más recursos en la formación y la emancipación» de estos jóvenes.

Los jóvenes sin referentes familiares están debajo el paraguas de la administración hasta que cumplen 18 años. La Generalitat contempla unas ayudas económicas para los extutelados hasta los 23 años que varía en cantidad y en duración en función del tiempo que han sido acogidos. Treball señala que, si hay menos menores para atender, podrá dedicar más esfuerzos a la hora de crear más plazas de pisos para los extutelados.

La Generalitat empezó a notar un descenso de la llegada de menores a partir de junio. Hasta mediados de agosto de este año, la DGAIA ha acogido a 1449 menores en toda Cataluña. Cuatro meses antes de acabar el año, las cifras se alejan mucho de los 3.698 que llegaron en el 2018 en Cataluña. Con la llegada del buen tiempo, las llegadas acostumbran a aumentar durante el año. En Tarragona, los centros acogieron a 22 extranjeros no acompañadosen junio,39 en julio y hasta el 15 de agosto han llegado 9.

La Generalitat anunciaba hace unas semanas un plan de apoyo de 14,5 millones de euros para los municipios que alojan centros de jóvenes que emigran solamente. Con estos recursos, el gobierno financiará la contratación de 110 dinamizadores cívicos entre los centros de menores. Esta nueva figura hará de enlace entre los centros y los municipios (consistorio, entidades, escoles...etc).

Estos profesionales trabajaran la emancipación juvenil, fomentarán la convivencia y el trabajo en red con la comunidad. También prevendrán y gestionarán los conflictos que se puedan ocasionar. En paralelo en esta partida, el Departament de Treball colabora con la Federació d’Empreses d’Inserció Laboral de Catalunya (FEICAT) para estimular la contratación de jóvenes vulnerables en estas empresas sociales a través de un convenio. Unos 600 jóvenes participarán en una formación de dos meses que irá seguida de una contratación laboral de 1 año. Esta acción está orientada por los municipios que tienen más centros de acogida, pisos tutelados y recursos del área de apoyo al joven extutelado.