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El jurado declara culpable por unanimidad al asesino de la expareja en Salou

El veredicto descarta que el acusado perdiera el control de sus actos

El acusado de matar su expareja en Salou, Abderrahmane H., en el inicio del juicio en la Audiencia de Tarragona.

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El jurado popular ha declarado Abderrahmane Hammou culpable por unanimidad de haber muerto la expareja, Fadoua Talssi, en Salou en junio del 2017. Según el veredicto que se ha hecho público este viernes al mediodía, el hombre no perdió el control de sus actos y acabó con la vida de la chica en el interior del coche de ella. El jurado no ha dado credibilidad a las explicaciones de Hammou y no cree que hubiera visto a la chica manteniendo relaciones con otro hombre la noche antes del crimen. El hecho de que al día siguiente discutieran, que ella lo insultara y que él se sintiera rechazado, «no sería razón suficiente para provocar una reacción tan desmesurada y clavarle más de una veintena de cuchilladas con gran intensidad», según el veredicto.

El jurado popular ha insistido en que el hombre era consciente del qué hacía porque no presentaba ninguna patología ni había consumido estupefacientes. Además, ha subrayado la «frialdad» con que acudió a la comisaría de los mossos de Salou para confesar la muerte de Fadoua, que tenía 30 años.

En el veredicto se ha considerado probado que la joven sufrió una muerte «casi inmediata», pero que las lesiones se hicieron en vida -con un cuchillo de grandes dimensiones- y que la chica se intentó defender. Sólo dos de los nueve miembros del jurado han dado credibilidad a los supuestos intentos del hombre de suicidarse con una soga después de cometer el crimen.

Penas de hasta 25 años de prisión

La fiscalía ha mantenido la petición de 23 años de prisión por un delito de asesinato con alevosía y ensañamiento, con el agravante de parentesco y el atenuante de confesión. El fiscal ha insistido en que el hombre intentó justificar el crimen con un arrebato pasional, pero ha argumentado que durante el juicio se ha demostrado que fue «premeditado».

Por otra parte, la acusación popular ha defendido que la confesión fue irrelevante para aclarar el caso y ha solicitado una pena de 25 años de prisión. A su vez, la defensa ha apuntado que habría que imponerle una pena de siete años de prisión por homicidio, dado que, a su parecer, la alevosía y el ensañamiento no han quedado acreditados y el hombre sí que sufrió un arrebato cuando se enteró de que la chica había empezado otra relación.

El acusado pide perdón a la familia

En el último turno de palabra, el acusado ha pedido perdón a la familia y se ha mostrado arrepentido por el crimen. Según ha manifestado, siempre ha dicho «la verdad» y aquel día se puso «nervioso», perdió la cabeza, se sentía «perdido» y «no sabía qué hacía». El juicio ha quedado visto para sentencia.

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