Diari Més

Prades adquiere los terrenos para construir el futuro observatorio astronómico

La instalación será la más actual de Cataluña, y espera atraer a unos 30.000 visitantes anuales

Aleix Roig, a la derecha, con la alcaldesa Lídia Bargas y los concejales Joan Llurba y Judit Olivé.

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El Centre Astronòmic de les Muntanyes de Prades (CAMP) ha dado un paso casi definitivo para su construcción. El Ayuntamiento ha adquirido unos terrenos donde se ubicará esta instalación, que será abanderada en Cataluña. Estos ocupan una superficie de unas 3,8 hectáreas en el Pla de la Guàrdia, y el consistorio les cederá a los impulsores del proyecto para poder edificar el observatorio.

El CAMP toma como referencia el observatorio de Àger, en la Noguera, una instalación construida hace una década. Este es el único que hay en Cataluña, y el de Prades podrá ofrecer algunas mejoras fruto de la evolución de los telescopios y los sistemas en estos diez años.

La oscuridad y la ubicación del municipio en una zona de montaña convierten Prades en uno de los puntos del territorio catalán donde mejor se puede ver y estudiar el cielo.

El CAMP será posible a medio plazo y todavía no tiene fecha fijada, según explicaron a la alcaldesa Lídia Bargas y el impulsor del observatorio y AstroPrades Aleix Roig. Con todo, ya «se han dado pasos importantes y se está trabajando para adquirir los permisos necesarios», expuso Roig.

Aleix Roig expuso que la elección de la ubicación fue «exhaustiva y exigente», llegando a realizar un estudio previo. También defendió que la construcción del CAMP será totalmente respetuosa con el lugar con el fin de generar «el mínimo impacto sobre el entorno natural».

Dos millones de euros

El Centre Astronòmic de les Muntanyes de Pradesbuscará acercar el observatorio a los escolares, tanto a alumnos como a profesores, a fin de que también sea útil en temas de investigación. Además, también se destinará al uso de profesionales. Con todo, Roig defendió que contaría con la presencia de unos 30.000 visitantes cada año y que generaría un impacto en el territorio de cerca de 2 millones de euros brutos anuales.

Con los terrenos ya adquiridos, el trabajo se centra en encontrar inversiones públicas y privadas. En este sentido, el CAMP contará con ayudas económicas del Ayuntamiento de Prades, el Consell Comarcal del Baix Camp, la Diputació de Tarragona y la Generalitat.

Prades también trabaja para conseguir la protección del cielo, un distintivo de Territorio y Sostenibilidad que permite regular tanto la contaminación lumínica como sonora. A esta iniciativa se han sumado una decena de municipios vecinos.

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