El volumen de un paciente del Morell obliga a movilizar una ambulancia especial

El pasado jueves por la tarde, 1 de marzo, el CAP El Morell solicitó una unidad, a las 18.34 horas, para hacer el traslado de un paciente con problemas de insuficiencia respiratoria al Hospital Joan XXIII.

El SEM envió una ambulancia de soporte vital y un vehículo de intervención rápida, que sólo tardó 12 minutos en llegar al CAP.

Al llegar, los técnicos vieron que el paciente, en concreto, pesaba unos 150 kilos y tenía un volumen considerable. A pesar de que, con las unidades enviadas se podía hacer el traslado, los técnicos llamaron al SEM para explicar la situación y solicitar una ambulancia bariátrica, que permitiría realizar el traslado con seguridad.

Desde el SEM, les comunicaron que la unidad bariátrica del Camp de Tarragona se encontraba en el taller por una reparación. Según fuentes del SEM, se revaloró la situación. Como el paciente se encontraba atendido en todo momento por el personal sanitario y evolucionaba favorablemente, desde el servicio de emergencias decidieron esperar la unidad de las Terres de l'Ebre, ya que ya no se trataba de una emergencia médica.

La unidad bariátrica tardó en llegar al CAP El Morell, pero finalmente, tres horas después de la solicitud del centro, el paciente llegaba al Hospital Joan XXIII.

La única diferencia de este tipo de ambulancias con respecto a las básicas es que disponen de una camilla más ancha y que puede aguantar más peso. Según fuentes del SEM, «estas no son necesarias en el territorio sino que son un plus» que les ofrece la empresa adjudicataria que ganó el concurso para el transporte sanitario. El acuerdo del SEM con esta empresa es que «las unidades se pueden utilizar siempre que estén operativas sin exigir un tiempo concreto de respuesta».

El SEM recalca que, aunque el traslado se podía hacer con la unidad básica, «se priorizó el bienestar y la seguridad del paciente ante una emergencia que ya no existía».