Salou reduce un 70% el endeudamiento municipal en tan sólo cinco años

Cuando faltan un par de semanas para que se aprueben las ordenanzas fiscales de cara al próximo año 2018, el gobierno de Salou ha hecho públicos algunos indicadores económicos que ponen de relieve «la gestión esmerada y rigurosa» del erario público al municipio, según el concejal de Gestión Económica, Toni Brull.

Concretamente, el Ayuntamiento ha reducido cerca de un 70% el endeudamiento municipal en los últimos cinco años. Según ha informado el gobierno municipal, mientras en el año 2012 el total del crédito municipal contraído era de 23,5 millones de euros, este año se ha reducido hasta los 7,2. Durante este periodo, la deuda ha disminuido hasta un tercio del total y las diferentes medidas implementadas han situado la ratio de deuda viva en un 16,3%, muy por debajo del 75% permitido por la legislación. Según destaca Brull, estos datos se han producido después de la implantación del control del gasto descentralizado a través de los centros gestores, una herramienta de revisión de las diferentes áreas municipales. Así, «se ha visto como los resultados se han traducido en un ajuste de indicadores económicos que han disminuido de manera considerable», se añade.

Para el concejal de Gestión Económica, Toni Brull, «el trabajo de control del gasto, de responsabilidad presupuestaria que venimos desarrollando los últimos años, ya cuando el concejal Jesús Barragán estaba al frente del área, y también desde que yo mismo he asumido el cargo, se ha notado esta tarea», apuntaba. Además, anunció que «nuestra intención es la de mantener la capacidad inversora con una aportación media anual al presupuesto de unos 5 millones de euros pero continuando reduciendo la deuda hasta niveles del 10% haciendo por lo tanto un trabajo serio y riguroso de control».

Otro dato relevante, según el concejal de Gestión Económica del Ayuntamiento, ha sido la progresiva disminución de la presión fiscal en la imposición directa, especialmente en tributos como el IBI, el impuesto que mayores ingresos supone para las arcas municipales, que ha pasado de un tipo de gravamen del 1,067% en el 2013 hasta el 0,720% actual de 2017, gracias a las reducciones del 3% en el 2014 y del 2% en el 2016, y de la congelación el resto de ejercicios. «Esta disminución de la presión fiscal es consecuencia directa del rigor en el control del gasto y de la capacidad de saneamiento del endeudamiento», apuntaba el concejal.