Vuelve el carné de buscador de setas en el Bosque de Poblet
Este viernes empieza a expedirse la autorización que el año pasado solicitaron 1.434 buscadores de setas
Seis consejos para buscar setas de forma respetuosa
Vuelve el carné de buscador de setas en el Bosque de Poblet. A partir de este viernes empieza a expedirse la autorización para poder ir a coger setas en el Paraje Natural de Interés Nacional (PNIN) de Poblet y su zona de influencia. Implantado el año 2012, este permiso, que es nominal, mantiene su precio inicial, de 10 euros por toda la temporada para los no locales y de 1 euro para los residentes en el territorio. De los 1.434 carnés tramitados el año pasado, la gran mayoría, más de un millar, fueron solicitados por vecinos de la zona, mientras que el resto eran de comarcas tarraconenses y leridanas. La directora del paraje, Ester Trullols, ha afirmado en el ACN que ya han recibido la petición de interesados en hacerse el carné. Este es el quinto año en vigor de la autorización -hubo una temporada que no se pudo aplicar por falta de setas-.
Este año se prevé que la temporada de producción de setas será similar -o hasta un poco mejor- que el año pasado. Según datos del Centro Tecnológico Forestal de Cataluña (CTFC), la campaña va con un poco de retraso por el calor y la sequía, pero la producción puede igualar o superar ligeramente la media de los últimos veinte años, querida en 60 kg/ha de setas -de todas las especies- al año -lo que presenta 73.000 t de setas en toda Cataluña.
El carné de buscador de setas en el PNIN de Poblet es una prueba piloto iniciada el año 2012 -en el 2013 se añadió la opción de un tique diario, al precio de 3 euros. Según la regulación, las autorizaciones permiten coger como máximo seis kilos por persona y día. La zona regulada comprende 3.520 hectáreas. 2.276 hectáreas pertenecen al término municipal de Vimbodí i Poblet; 425 en l'Espluga de Francolí; 798 en Montblanc; y 18 en Prades.
En toda el área hay bosques públicos que gestiona la Generalitat. El Gobierno ha manifestado en varias ocasiones su intención de extender a este plano piloto al resto de regiones buscadoras de setas del país, a través de una normativa concreta. El dinero recaudado a través del carné revierte en el PNIN de Poblet. Así, los beneficios de la última temporada sirvieron para repasar la pintura de las setas dibujadas sobre unos árboles que configuran la ruta micológica.