«Las novedades tienen que ser controladas para no desnaturalizar la fiesta»

—Hoy empieza la Fiesta Mayor, con algunas novedades. ¿Cuáles son las más destacadas?

—Siempre hay muchas, porque las actividades que se hacen se procuran mejorar, lo cual de por si ya genera una novedad. ‘Viu el seguici amb els 5 sentits’, por ejemplo, está rellenado actividades diferentes del año anterior, un nuevo contenido. Así que al programa de este año no sólo hay cosas que se introducen por primera vez. Y por otra parte, pensemos que las novedades tienen que estar controladas, porque no puedes modificar las fiestas mayores, no descontextualizarlas ni desnaturalizarlas.

—¿Me puede poner un ejemplo?

—Una de las que es más simbólica, y que forma parte de nuestro relato de fiesta, es la introducción de una nueva moneda, el soldó. El soldó es una piedra calcárea, amarillenta; en el municipio hay bastantes pedreras que se explotaron para construir fortificaciones en la época de los romanos y a la Edad Media, y la piedra en sí era un objeto de valor. Lo que hacemos es rescatar una palabra de nuestro vocabulario y la introducimos en forma de moneda. Sabemos que al inicio eso puede generar ciertas molestias como cosa novedosa, pero con el tiempo pensamos que se acabará consolidando y formando parte de la normalidad. También lo hicimos el año pasado introduciendo en los espacios nombres como Kies y Olzina, que son referentes de nuestra historia como municipio.

—También proponen un intercambio de juguetes.

—Sí, este año se introduce el intercambio de juguetes en la plaza para fomentar la concienciación en la sostenibilidad y la reutilización de los juguetes que quedan en desuso. Es un proyecto que estamos trabajando con la Fundación EnXarxa, y que tendrá un largo recurrido, no será el único año que se haga, tenemos interés que esta nueva actividad se prolongue en el tiempo. Eso se hará la mañana del sábado 14 de enero, que está bien rellenado de actividades muy encaminadas a los chiquillos, con la Carrera de payasos y payasas y el pasacalle de la Cia Sidral y su espectáculo ‘Los Mentirosos’.

—En el aspecto musical también se estrena una nueva propuesta.

—Sí, tenemos el Musicland, que se hace la noche del lunes al martes y está dirigida a público joven. Será una noche con música electrónica con Djs de referencia, y que incluye un espectáculo de mapping dentro de la propia performance. Para hacerlo nos hemos querido articular a través de la URV, porque la universidad también forma parte del ADN de nuestro municipio.

—La música es uno de los pilares del programa de fiestas de Sant Antoni. ¿Cómo se diseña la oferta musical para satisfacer los gustos|sabores de un público tan diverso como el que hay en el municipio?

—Vila-seca es música. Lo llevamos en el ADN, de la formación musical hemos hecho un rasgo diferencial. ¿Cuáles son los criterios con los cuales nosotros diseñamos una oferta musical? De entrada buscamos que sea amplia y variada, y que el tipo de música que ofrecemos no sea fácil de consumir de manera habitual. La Fiesta Mayor tiene que servir para acercarnos diferentes tipos de música, y que todo el mundo en cierta medida se sienta un poco reflejado. Si hay una parte del público que está muy contenta y una parte que está muy descontenta, es que nos hemos equivocado. No puedo esperar que todo el mundo esté encantado, pero sí que quiero llegar a un grado general de satisfacción que sea alto. De todos modos quiero decir que la elección de los grupos forma parte de un proceso participativo en que trabajamos con la Mesa de fiestas y las organizaciones. Yo, por ejemplo, los grupos de música de la zona Kies del sábado no los conocía, por descontado que me he informado de quiénes son, pero doy la posibilidad de que la Mesa de fiestas escoja la mejor de las opciones, siempre ajustándose al presupuesto que tenemos.

—El año pasado se estrenó la actividad ‘Viu el Seguici amb els 5 sentits’, que este año vuelve a ser al programa de fiestas. ¿La experiencia del año pasado os hará ajustarla de alguna manera?

—Siempre intentamos mejorar las cosas que sean mejorables, por eso al final de las fiestas siempre hacemos un análisis de cómo han ido. Pero lo que queremos con esta actividad es acercar a los chiquillos a las entidades, que son el alma de nuestro municipio, el latido de nuestro corazón. Esta propuesta el año pasado fue una novedad, este año repite y también tiene vocación de permanencia.

—La Fiesta Mayor empezará esta misma noche con el pregón de Lluís Bernabé Valera, director de la Fundación La Marató de TV3. ¿Por qué habéis escogido a este pregonero?

—Vila-seca tiene un alma social muy profunda, somos uno de los municipios que más se entrega con el Maratón de TV3, y este año creemos que era de derecho reconocer toda la tarea que hacen, y también la de nuestros conciudadanos. Hemos tenido la oportunidad que Lluís Bernabé acepti hacer el pregón, aunque es una persona que no es habitual que haga estas cosas, y por lo tanto estamos contentísimos.

—Ahora hace un año se estrenaba en su cargo. ¿Qué balance hace, de estos doce meses?

—Ha sido un año muy intenso, en el cual hemos querido variar algunas cosas, y también poner mi huella. Hemos aprendido mucho, creo que hemos hecho cosas bien y que tenemos cosas que mejorar. Estoy altamente satisfecho, pero sin entrar en ningún tipo de complacencia, sabemos que la mejora es un proceso continuo, y que la gente anhela diferentes cosas y tenemos que estar pendientes. Las fiestas evolucionan y en eso estamos: acabo de diseñar estas fiestas con el Patronato, las entidades y los grupos que participan, y ya estamos pensando en las de verano. Y todo, sin desnaturalizarlas, porque al final las fiestas también son tradición: no se entiende la Fiesta Mayor sin un componente de tradición que nos identifique como municipio.