El Parlamento Europeo vota el lunes la propuesta para levantar la inmunidad a Puigdemont, Comín y Ponsatí

Así, los tres independentistas podrían llegar a tener hasta tres frentes judiciales nuevos esta primavera: las euroórdenes, el recurso por el suplicatorio y la prejudicial de Llarena en Luxemburgo.

Votación al pleno de la Eurocámara

Antes de llegar aquí, el lleno de la Eurocámara todavía tiene que decir si acepta levantar la inmunidad de Puigdemont, Comín y Ponsatí, tal como propone el Comité de Asuntos Jurídicos. Por 15 votos a favor, 8 en contra y 2 abstenciones, los 25 miembros de este comité parlamentario aprobaron los tres informes a favor del suplicatorio.

Ahora es el turno de los 705 eurodiputados que forman un Parlamento Europeo controlado por populares, socialistas y liberales. Son las familias políticas donde se integran PP, PSOE y Ciudadanos. Fuentes del Partido Popular Europeo (187 eurodiputados) y de los liberales de Renovar Europa (97 eurodiputados) aseguran que su posición es favorable a levantar la inmunidad, si bien no tienen previsto discutir internamiento sobre el sentido del voto. Los socialistas europeos (175 eurodiputados) por ahora tampoco prevén debatir sobre el suplicatorio, según fuentes del grupo.

En cambio, los Verds/ALE (73 eurodiputados) y la Izquierda Unitaria Europea (39 eurodiputados) votarán en bloque en contra de levantar la inmunidad a los tres independentistas. Fuentes parlamentarias también apuntan que partidos como elN-VA o los socialistas eslovenos se opondrán al suplicatorio. El jefe de los socialistas malteses, Alfred Sant, también ha mostrado su rechazo al levantamiento de la inmunidad.

Por lo tanto, los de JxCat por ahora tienen asegurado poco más de un centenar de votos, insuficiente para evitar la pérdida de la protección parlamentaria.

La votación será por mayoría simple, es decir, gana la opción que tenga más votos. Antes de la pandemia se hacía a mano alzada, de manera tal que se podía ver presencialmente qué votaba a cada eurodiputado, aunque después no se publicara el listado de votos. Con la introducción del voto telemático, desaparece la transparencia de la votación sobre los suplicatorios, que técnicamente no es secreta como sí que lo era al Comité de Asuntos Jurídicos.

Siguientes pasos

Si finalmente el pleno retira la inmunidad a los tres independentistas, el presidente de la Eurocámara, David Sassoli, tendrá que comunicar la decisión «inmediatamente» a las autoridades españolas. En su trono, estas tendrán que informar a las autoridades belgas y escocesas para reactivar las euroórdenes contra Puigdemont, Comín y Ponsatí.

En paralelo, las demandas de extradición tendrán que estar pendientes de las preguntas prejudiciales que el juez instructor del Tribunal Supremo tiene previsto enviar a Luxemburgo sobre el precedente belga en el caso de Lluís Puig.

Críticas a la gestión del suplicatorio

Por su parte, Puigdemont, Comín y Ponsatí también prevén ir a Luxemburgo con la intención de revertir un eventual levantamiento de la inmunidad por parte de la Eurocámara. Incluso, se plantean pedir cautelares al Tribunal General de la UE, una medida que se concede en pocas ocasiones.

Desde JxCat ven «irregularidades» en el procedimiento como «la falta de imparcialidad» del presidente del comité, el eurodiputado de Ciutadans, a Adrián Vázquez, y del ponente del caso, el ultraconservador búlgaro, Angel Dzhambazki. También critican la «sobrerrepresentación española» al Comité de Asuntos Jurídicos y que, según ellos, «no se haya traducido prácticamente nada de la documentación» que aportaron.

Además, la eurodiputada Clara Ponsatí denunciará la aprobación en comité de su informe porque mencionaba el delito de malversación cuándo sólo se le acusa de sedición en el caso del 1-O. La Eurocámara corrigió el error, pero Ponsatí considera que es insuficiente para reparar «el daño causado».

El profesor de derecho europeo de la Universidad de Amberes, Henri de Waele, ve difícil que los tribunales de la UE reviertan el levantamiento de la inmunidad a Puigdemont, Comín y Ponsatí. No hay precedentes de un movimiento como este, si bien Luxemburgo ha revisado anteriormente el examen de la Eurocámara sobre casos de inmunidad.

«Si no hay un claro error de procedimiento, el tribunal respetará la opción política del Parlamento Europeo», anticipa de Waele en declaraciones a la ACN.