Este equipo ha colaborado durante años para comprender el mecanismo de adhesión de dos bacterias patógenas humanas:
Mycoplasma genitalium, causante de varias patologías del trato urogenital, y
Mycoplasma pneumoniae, causante de hasta el 40% de las neumonías primarias atípicas.
En trabajos previos, los científicos han conseguido descifrar la estructura tridimensional de las proteínas mediante las cuales las bacterias se adhieren a las células para iniciar la infección.
Las similitudes entre los complejos de adhesión de
M. genitalium y
M. pneumoniae indican que posiblemente tienen un origen evolutivo común. Curiosamente, dicen los autores del trabajo, estos complejos tienen una sorprendente similitud con proteínas víricas clave para la infección, lo que sugiere que tanto bacterias como virus podrían estar utilizando mecanismos de adhesión estrechamente relacionados tanto a nivel funcional como evolutivo.
Además, las variaciones identificadas en los complejos de adhesión posiblemente confieren a las bacterias la capacidad de colonizar diferentes tejidos del organismo. Eso es importante porque, muchas veces, la gravedad de la enfermedad depende del lugar exacto donde se produce la infección. En este sentido, los síntomas más graves asociados a las infecciones por
M. pneumoniae se han relacionado con la diseminación de la bacteria fuera de los pulmones. Por lo tanto, la comprensión de cómo las variaciones en las adhesines determinan o alteran el lugar de infección puede ayudar a mejorar el diagnóstico y la prevención de infecciones complicadas.