Los Mossos d'Esquadra mantienen el dispositivo en los accesos a la fiesta
rave ilegal en una nave de Llinars del Vallès conocida como Bòbila, en el Vallès Oriental.
La policía catalana está controlando el acceso e identifica a las personas que salen. Según los Mossos, hay más de 200 vehículos en la zona y se han detectado muchas matrículas extranjeras. La policía catalana asegura que seguirá actuando con criterios de oportunidad, congruencia y proporcionalidad.
Por eso, consideran que entrar dentro de la nave abandonada donde se está haciendo la fiesta ilegal podría generar agravios peores. Por su parte, los asistentes de la
rave dicen que se quieren quedar hasta el lunes. Muchos de los vehículos son furgonetas donde se puede dormir.
El dispositivo junto con la policía local de Llinars del Vallès se inició la noche de Fin de Año. Según ha detallado el alcalde del municipio, Martí Pujol, hace dos años ya hubo una fiesta de estas características por Fin de Año y también el año pasado hubo un nuevo intento, que en aquella ocasión se pudo detener a tiempo.
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