Una vez se identificó, los investigadores centraron el trabajo al conseguir el máximo de indicios que relacionaran al hombre con los incendios que se estaban provocando. El miércoles 21 de octubre pasado, los agentes lo detuvieron cuando acababa de quemar de nuevo un contador de la luz en el interior de una portería del barrio de Trinitat Vella (en el distrito de Sant Andreu). Los Mossos le interceptaron pastillas de encender fuego escondidas y un mechero.
La investigación, que todavía continúa abierta, ha podido relacionarlo directamente con dos hechos y se trabaja con la hipótesis que estaría detrás del resto de incendios que se han producido con el mismo modus operandi. Actualmente se están investigando un total de 22 fuegos. El detenido, ha pasado este sábado por la mañana a disposición judicial.