Diari Més

Las vacunas de Pfizer y Moderna no provocan infertilidad masculina, según un estudio

La desconfianza con las vacunas es uno de los problemas que en los EE.UU. han hecho reducir las inoculaciones

Pla detall de la vacuna Moderna.

vacuna ModernaACN

Publicado por

Creado:

Actualizado:

Las vacunas de Pfizer i Moderna contra el nuevo coronavirus son «seguras para la reproducción masculina» y no tienen un impacto negativo en la fertilidad de los hombres, según un estudio elaborado por la Universidad de Miami (UM) y divulgado este jueves en la 'Revista de la Asociación Médica Norteamericana' (JAMA).

«Somos los primeros a examinar si hay algún impacto de la vacuna de la covid-19 en el potencial de fertilidad masculina, y no lo encontramos», ha declarado en un encuentro virtual el científico a Ranjith Ramasamy, responsable del estudio publicado hoy.

Los hallazgos y el estudio clínico sugieren que las vacunas de Pfizer o de Moderna no produjeron efectos adversos reproductivos en los hombres participantes que recibieron la vacuna.

Eso «podría tener enormes implicaciones para reducir la vacilación ante la vacunación» por parte de las personas, según Ramasamy, profesor y director del Programa de Urología Reproductiva de la Facultad de Medicina Miller de la UM.

El equipo de científicos no estudió los efectos de la vacuna monodosis contra la covid-19 de Johnson & Johnson.

Ramasamy explicó en un acto virtual que él y su equipo de la Facultad Miller examinaron a 45 voluntarios hombres saludables entre las edades de 18 y 35 años y evaluaron los parámetros del esperma antes y después de vacunar.

La vacuna no impacta en la fertilidad masculina

«Ninguno de los participantes en el estudio mostró ninguna merma en los parámetros de esperma», ha destacado al autor principal del informe.

La conclusión, añadió Ramasamy, es que las «vacunas contra la covid-19 parecen ser seguras para la fertilidad masculina».

Los voluntarios, que no tenían problemas de fertilidad al inicio del estudio, proporcionaron una muestra de semen antes de recibir la primera dosis de la vacuna Pfizer o Moderna y entregaron otra muestra unos 70 días después de la segunda dosis.

«Este es el ciclo de vida completo de los espermatozoides y 70 días es tiempo suficiente para ver si la vacuna afecta a los parámetros del semen», dijo Daniel C. González, estudiante de la mencionada facultad y uno de los participantes en la elaboración del estudio.

«Medimos el volumen de semen, la concentración de espermatozoides y la cantidad total de espermatozoides en movimiento y descubrimos que no había disminuciones en ninguno de los parámetros en comparación con el análisis de referencia», dijo González.

El estudio del equipo de Ramasamy demuestra que no hay ninguna evidencia, ni real ni teórica, que la vacuna contra esta enfermedad cause infertilidad.

Acabar con la desconfianza

Además, estos hallazgos científicos servirán para acabar con «la vacilación sobre la vacuna (...), una barrera para poner fin a la pandemia de la covid-19.

«Creemos que parte de esta vacilación se debe a la opinión pública sobre si la vacuna podría afectar negativamente a la fertilidad», cosa que queda descartado con este estudio, ha apuntado a Ramasamy.

Los primeros ensayos clínicos rigurosos de las vacunas de ARNm BNT162b2 (Pfizer) y ARNm-12732 (Moderna) que fueron permitidas en esta situación de emergencia por la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de los EE.UU. no evaluaban su posible «toxicidad reproductiva», según Ramasamy.

Por eso, a pesar de la «alta eficacia y los pocos acontecimientos adversos encontrados en los ensayos clínicos», sólo el 56% de las personas en los Estados Unidos quería recibir la vacuna.

El estudio, que concluyó el pasado 24 de abril, se llevó a cabo entre el 17 de diciembre y el 12 de enero pasados y la media de edad de los 45 participantes voluntarios fue de 28 años.

Otros científicos de la Facultad Miller de la UM implicados en la elaboración del estudio son Daniel E. Nassau, experto en urología reproductiva; Kajal Khodamoradi, profesor de investigación clínica; Emad Ibrahim, profesor asistente de Urología y cirugía neurológica; Ruben Blachman-Braun, urólogo, y Jesse Ory, experto en urología reproductiva.

tracking