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Infraestructuras

Barcelona tendrá seis nuevos espacios públicos con nombres de mujer

La ciudad intenta revertir el desequilibrio entre hombres y mujeres en la denominación de plazas, calles y parques

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La Ponencia del Nomenclátor del Ayuntamiento de Barcelona ha tramitado la denominación de seis espacios de la ciudad con nombres de seis mujeres, representantes de la memoria del activismo vecinal, político y sindicalista y también de la cultura de la ciudad. De estos seis espacios, uno corresponde a la actual calle del Almirante Aixada, en la Barceloneta, que la Ponencia ha acordado que pase a tomar el nombre de Emília Llorca Martín, una figura reconocida en el barrio por el compromiso con los derechos de los vecinos. El resto de denominaciones rinden homenaje a las figuras de Conxa Pérez Collado (Eixample), Consuelo Casales y Genover (Gracia), Teresa Boronat i Fabra e Isabel Domínguez Paniagua (Sant Andreu) e Irena Sendler (Sant Martí).
Con estos acuerdos, el Ayuntamiento de Barcelona profundiza en el compromiso de revertir el desequilibrio y la poca presencia de nombres de mujer y nombres populares al nomenclátor de la ciudad, una estrategia iniciada ya al mandato anterior. La presencia femenina es todavía hoy escasa, y cuando las mujeres están representadas en las calles y plazas, mayoritariamente se trata de personajes relacionados con la Iglesia, la monarquía o la aristocracia, a causa de la hegemonía de los hombres privilegiados en el relato de construcción de la ciudad.

El informe favorable de la Ponencia es un trámite imprescindible para hacer efectiva la denominación de un espacio público, impulsada ya sea por el tejido social o cualquier agente. El proceso también requiere el posicionamiento del consejo plenario del distrito correspondiente, y culmina con el correspondiente decreto de alcaldía.

Emília Llorca Martín, activista social y vecinal de la Barceloneta

El cambio de nombre de la calle del Almirante Aixada, teniente general de las galeras del emperador Carlos I (siglo XVI), por el de Emília Llorca fue aprobado el 19 de marzo de 2019 por el Plenario de Ciutat Vella. Con el informe favorable de la Ponencia, ahora se abrirá el periodo de exposición pública para recibir alegaciones, y una vez concluido, se elevará para el pertinente decreto de alcaldía.

Emília Llorca (Barcelona, 1948 - 2009) nació y vivió en la Barceloneta, donde a finales de los años 80 empezó a hacerse muy popular por su participación a la Comisión de Fiestas de la calle Pescadors y la recuperación de fiestas populares que se habían perdido, como la del Entierro de la Sardina o la Castañada. Al principio de los 2000, Llorca se involucró en problemas que afectaban en el vecindario del barrio, con campañas para mejorar el sistema de gestión y de atención del centro de atención primaria. Otro reclamo vecinal donde tomó parte fue la recuperación de la escuela Mediterránea (antigua escuela Lepanto) que, a causa de su mal estado fue derribada en el 2007.

Con la Asociación de Vecinos de la Òstia, creada en el 2005, Emília Llorca se erigió como una de las primeras activistas vecinales en la lucha contra la expulsión de vecinos disfrutado de la especulación inmobiliaria. Uno de los momentos más significativos fue la lucha contra el Plan de Ascensores del 2007, que implicaba la desaparición de muchas viviendas y la consecuente expulsión de vecinos. Conjuntamente con Miles de Viviendas, la Asociación de Vecinos del Òstia consiguió parar el plan y evitó las consecuencias.

Aparte de este cambio de denominación, la Ponencia también ha informado favorablemente de bautizar cinco espacios que no tienen nombre.

Se trata de la plaza Conxa Pérez Collado, a la confluencia de las calles de Tamarit y del Conde Borrell, a la placita urbanizada con la superisla de Sant Antoni, en el distrito del Eixample. Pérez Collado (Barcelona, 1915 – 2014), nacida en las Corts, a los 13 años empezó a trabajar en fábricas y muy pronto fue una sindicalista destacada y militante de la CNT y de la FAI. Durante la Guerra Civil se implicó en la defensa de la República, tanto en el frente como en la reraguàrdia. Después de la guerra, pasó por el campo de concentración de Argelers, y volvió a Barcelona en 1942. Durante 50 años estuvo al frente de una parada en los Encantos del mercado de Sant Antoni, donde escondía compañeros, propaganda y material clandestino, y punto de encuentro de militantes anarquistas.

También se ha denominado el mirador de Consuelo Casales y Genover, al Park Güell, a la intersección entre la bajada de Glòria y de la avenida del Coll del Portell, barrio de la Salud, distrito de Gracia. Casales (Barcelona, 1942 – 2012), nacida en el Eixample, fue profesora de secundaria y una destacada activista feminista, comunista, ecologista, pacifista e internacionalista. Participó en diferentes espacios feministas, como las Jornadas Catalanas de la Mujer de 1976, la Coordinadora Feminista, Ca la Dona y el grupo Mujeres Antimilitaristas, desde donde participó en diferentes campañas contra la OTAN y las guerras de Bosnia o del Golf. También militó en diferentes organizaciones independentistas de izquierdas como Bandera Encarnada o el Movimiento de Defensa de la Tierra, e impulsó y colaboró en diferentes entidades de Gracia.

La calle de Teresa Boronat i Fabra está situada en la esquina con el paseo de Torras y Bages y delante de la calle Víctor Colomer, en los antiguos cuarteles, en el barrio y distrito de Sant Andreu. Boronat (Barcelona, 1904 – Sant Antoni de Calonge, 1983), nacida en Sant Andreu del Palomar, fue una destacada artista, actriz y bailarina de la primera mitad del siglo XX. Formada en el Gran Teatro del Liceo, la Escuela Catalana de Arte Dramático y a la Escuela Municipal de Música de Barcelona, adquirió fama y prestigio en el París de los años 20 e inspiró obras de varios artistas, como el dramaturgo Ignasi Iglésias, el escultor Pau Gargallo, el pintor Pere Pruna y el escritor Carles Soldevila. Durante la Guerra Civil, se significó a favor de la República y no volvió a vivir en Cataluña hasta la muerte de Franco, retirándose de manera modesta a la Costa Brava.

Los jardines de Isabel Domínguez Paniagua están en el espacio limitado por las calles de Sant Adrià, Llinars del Vallès y el paseo de Enric Sanchis, en el barrio del Buen Pastor, distrito de Sant Andreu. Domínguez Paniagua (Cabezabellosa de la Calzada, Salamanca, 1947 – Sabadell, 2005), fue una activista social y política, vecina del Buen Pastor. Vecina del barrio desde 1969, enseguida se significó al reclamar mejoras de las condiciones de vida de los vecinos, como mejoras urbanísticas, la llegada del servicio de autobús, o la construcción de un ambulatorio. A causa de su actividad sindical clandestina, sufrió despidos|despedidas e incluso llegó a pasar por las prisiones de la Trinitat Vella y Alcalá de Henares durante los últimos años del franquismo. En 1976 participó activamente en la creación e impulso de la Asociación Catalana de la Mujer y sus primeras jornadas. En Sabadell trabajó de educadora de calle y trabajadora social y creó el Centro de Atención a la Mujer del ayuntamiento de la localidad vallesana.

La calle de Irena Sendler está situada entre la calle de Álava y los jardines de Elisava, debajo de la plaza de las Glorias, en el barrio del Parque y la Llacuna del Poblenou, distrito de Sant Martí. Sendler (Varsovia, 1910 – 2008), conocida como el Ángel del Gueto de Varsovia, fue una enfermera polaca que durante el empleo|ocupación nazi en la Segunda Guerra Mundial consiguió sacar del gueto judío miles de niños, salvándolos del Holocausto, a quien|quién proveía de documentación falsa y refugio con la colaboración de familias polacas, orfanatos y conventos, entre otros. Su nombre es uno de los reconocidos como los Justos entre las Naciones, reconocimiento de Israel a las personas no judías que durante el Holocausto colaboraron al salvar vidas judías del exterminio nazi.

Nueva señalización de memoria de la ciudad

La Ponencia del Nomenclátor también ha aprobado nueva señalización de memoria de la ciudad. Así, se ha aprobado instalar una placa en homenaje al escritor Manuel de Pedrolo en la fachada de la finca donde vivió, en Sarrià-Sant Gervasi; un atril de memoria en Sant Martí sobre la figura de Berta Cáceres, la líder indígena lenca hondureña, por|para su lucha activista feminista y en defensa del medio ambiente; y la renovación y homologación con los atriles de memoria del Ayuntamiento de Barcelona, de lo que recuerda en el Castillo de Montjuïc al presidente de la Generalitat Lluís Companys, fusilado por la dictadura franquista en 1940.

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